domingo, 13 de noviembre de 2011

Día del Pensamiento Nacional




13 de Noviembre - Día del Pensamiento Nacional (Télam)

Conocer para querer y ser, dejando atrás el encanto por lo ajeno

Por Emiliano Vidal

¿Por qué razón a poco de llegado al gobierno Néstor Kirchner promovió un proyecto que el Parlamento transformó en ley -la 25.844- instituyendo el 13 de noviembre como Día del Pensamiento Nacional, en homenaje al nacimiento del escritor y pensador Arturo Martín Jauretche?

Quizás la respuesta más simple sea: por la necesidad de cambiar una mentalidad encandilada por lo externo en desmedro de lo propio.

Una tarea orientada a recuperar la autoestima de un pueblo perdida a lo largo de distintos capítulos de nuestro pasado, cuando con el golpe de Estado de 1930 el país retrocedió casi cien años porque la espada al servicio del coloniaje apagó el destello de una reciente democracia.

Un golpe que consagró el retorno a un modelo agroexportador a favor de Europa, impuesto por los vencedores de Caseros en 1852.

Un golpe que en lo institucional prostituyó con el fraude electoral el voto universal, secreto y obligatorio de la Ley Sáenz Peña.

Un golpe que terminaría transformando a los años treinta en la “Década Infame”, así definida por el periodista tucumano nunca bien recordado José Luis Torres.

Ante un contubernio que procuró dar sostén al régimen y que incluyó la participación del alvearismo, un grupo de jóvenes militantes de la Unión Cívica Radical conformó FORJA, una agrupación política que trasegó el espíritu y nervio yrigoyenista al movimiento político y social que nacería con la revolución de 1943 y que tomaría el nombre de peronismo.

Entre sus integrantes, se destacó Jauretche, quien junto a Raúl Scalabrini Ortiz, supo definir la orientación de esa flamante herramienta de combate.

Arturo Martín Jauretche, nacido en el partido Lincoln, provincia de Buenos Aires, el 13 de noviembre de 1901, supo de pequeño de las rebeliones radicales contra las minorías que usurpaban el poder y que, ya adolescente, pudo ver la coronación de esa lucha cuando en 1916 Hipólito Yrigoyen asumió por primera vez la presidencia de la Nación por voluntad mayoritaria de las urnas.

Por eso en 1930 no dudó en encabezar la oposición al alvearismo - importante sector dentro del partido de Leandro N. Alem-, oponiéndose al gobierno fraudulento de la Concordancia que impulsó José Félix Uriburu y continuó Agustín P. Justo.

En esas luchas estuvo la simiente de la causa peronista de la década siguiente, a la cual Jauretche adhirió con una fuerte convicción y que al tiempo lo llevaría a ocupar la presidencia del Banco de la Provincia, único cargo público que tuvo.

Para Jauretche, el voto era algo más que un derecho cívico en una República democrática: era el primer y fundamental paso para conformar una nación moderna, pujante y sostenida por la identidad de un pensamiento propio, imprescindible para liberarse de todo coloniaje.

Junto a pensadores como Ernesto Palacio y Arturo Sampay, además de Scalabrini Ortiz y el propio José Luis Torres, entre otros, Jauretche conformó una línea de obstinada defensa del concepto de ser nacional y, por ende, de resistencia a todo intento de sometimiento ideológico y cultural provenientes de las potencias extranjeras, que a esa altura, además de Gran Bretaña, comenzaba a incluir a los Estados Unidos.

La corriente del Pensamiento Nacional demanda conocer primero más y mejor lo propio antes que priorizar lo ajeno.

Desde 1930 hasta su muerte el 25 de mayo de 1974, Jauretche sintió que la tarea intelectual también era un deber moral para evitar que la vulnerabilidad ideológica lastimara a un pueblo con el descrédito de las instituciones y la invasión cultural
extranjera.

Con mayor precisión lo explicó uno de sus discípulos, el recientemente fallecido Ernesto Goldar, en el taller “Fermín Chávez 2011 sobre Pensamiento Nacional”.

Dijo que Jauretche sostenía que las grandes empresas “deben ser del Estado ya que son las únicas que tienen interés en el país; la otras sólo buscaran el desarrollo de ellas mismas”.

Sus obras cumbres, “Los profetas del odio”, “El medio pelo en la sociedad argentina” y el “Manual de zonceras argentinas” resumen ese sentimiento.

Aparte de la crisis económica, hace diez años la Argentina padeció una crisis de identidad, motivo por el que, en el 2003, un gobierno surgido de la crisis misma comenzó a reivindicar la historia como constructora del futuro, razón de la consagración del 13 de noviembre como Día del Pensamiento Nacional.

Desde entonces se realizan miles de conferencias, encuentros, seminarios, talleres, documentales y muestras en torno de la importancia de saber cuál es el camino.

“Pensar desde sí, para ser uno mismo, es liberarse. Despojarse de lo ajeno, deseducarse. Hay que pensar lo nuestro desde nosotros mismos”, afirma el filósofo Gustavo Cirigiliano, mentor del Proyecto Umbral.

Conocer para querer. Saber para valorar. Pensar como Nación. Ese es el legado de Arturo Jauretche.

13/11/11 Télam

3 comentarios:

La Roca (Resumen de los diarios gráficos) dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
El Doc 9 dijo...

Les quería agradecer por difundir este anota publicada de mi autoría, en la agencia Télam. Los saludo fuertemente y lo hago desde mi blog, Doc9, abrazo grande

La Peñaloza dijo...

No tiene de que El Doc 9, desde ya muy agradecidos nosotros, un abrazo grande, visitamos su excelente blog y lo seguiremos haciendo.