miércoles, 25 de febrero de 2015

Gral. José Francisco de San Martín



¨ La sangre americana que se vierte es muy preciosa y debía emplearse contra los enemigos que quieren subyugarnos. El verdadero patriotismo, en mi opinión, consiste en hacer sacrificios: hagámoslos, y la patria, sin duda alguna, es libre, de lo contrario seremos amarrados al carro de la esclavitud ¨

*Gral. José Francisco de San Martín



* José Francisco de San Martín (Reducción de Yapeyú, Virreinato del Río de la Plata, 25 de febrero de 1778, actual Provincia de Corrientes, Yapeyú, Argentina — Boulogne-sur-Mer, Francia, 17 de agosto de 1850)




martes, 24 de febrero de 2015

24 de febrero de 1946


El 24 de febrero de 1946 Perón se impone por el 56% de los votos a la fórmula Tamborini-Mosca apoyada por el embajador norteamericano Spruille Braden.
El peronismo ganó todas las provincias, menos Corrientes donde una coalición conservadora se impuso en el colegio electoral. En la provincia de Buenos Aires, en los cargos de gobernador y vicegobernador los resultados definitivos dieron el triunfo a la fórmula Mercante-Machado con un porcentaje del 53,2%.
El apoyo popular, organizado por el Partido Laborista y la UCR Junta Renovadora, le dio la presidencia a Perón.

domingo, 22 de febrero de 2015

Es la política, estúpido



Es la política, estúpido
Por Horacio Verbitsky


La marcha encabezada por un grupo de fiscales mostró a una nueva derecha con capacidad electoral y de movilización callejera. Podría soldarse así la profunda fisura del sistema político fundado por una oligarquía incapaz de llegar al poder por medios democráticos y que ha debido colonizar para ello a los partidos populares. Esta nueva derecha constituiría un saludable estabilizador, al margen de los propósitos de los organizadores, como suele ocurrir en los grandes acontecimientos colectivos.

Macri, Massa, Binner con Donda, Bullrich. Una jornada de tristeza y compunción en defensa de la República.
La marcha que un grupo de fiscales de Comodoro Py encabezó bajo el temporal del jueves 18, constituyó la presentación de una nueva derecha política que además de capacidad electoral en algunos distritos, comienza a desarrollar aptitud para la movilización callejera, un rasgo distintivo del centro hacia la izquierda de la política argentina. Esta es una novedad significativa que podría poner remedio a la fisura más profunda del sistema político, que el año próximo cumplirá un siglo y constituiría un saludable elemento estabilizador, al margen de los propósitos de los organizadores de la marcha, como suele ocurrir en los grandes acontecimientos colectivos.

Al mismo tiempo, hay un intento por desalojar al kirchnerismo de posiciones simbólicas desde las que se ha movido con comodidad en la última década. “No nos perdonan la anulación de las leyes de punto final y obediencia debida”, dijo CFK horas antes desde Atucha. Esa es una reflexión de fondo que requeriría un intenso trabajo político por parte de la militancia para que fuera más claro el nexo entre esa decisión que liberó al sistema político del chantaje de los guardaespaldas del capitalismo, como llamó a las Fuerzas Armadas el poeta salvadoreño Roque Dalton, y los episodios de estos días.

Sin partido

Las clases sociales que organizaron la Nación e insertaron su economía en el mercado mundial como proveedora de bienes primarios e importadora de productos industriales y excedentes de población no fueron capaces de construir un partido político que expresara sus intereses en la competencia electoral, a diferencia de lo que ocurrió en otros países. Desde 1916 en adelante esa oligarquía liberal que importó su modelo económico de Gran Bretaña y tuvo su faro cultural en Francia, fue una y otra vez derrotada en las urnas por fuerzas plebeyas que expresaron el ascenso social de la inmigración extranjera y de los migrantes internos en la generación siguiente. Las políticas regulatorias y distributivas del yrigoyenismo y del peronismo enardecieron a esos sectores propietarios, que no compartían la visión de la izquierda marxista para la que esos movimientos eran tibios reformistas que propugnaban una imposible conciliación de clases e incluso portaban elementos autoritarios y fascistizantes. El remedio a su impotencia electoral fue la conversión de las Fuerzas Armadas en Partido Militar, que entre 1930 y 1990 dieron entre uno y tres golpes por década. A ello colaboró la Iglesia Católica, que les proveyó de munición conceptual para tomar una y otra vez el gobierno en defensa de la salvación y la unidad nacional. Este ciclo recién concluyó en 1983, fecha fundacional de la democracia argentina, que puede dividirse en dos períodos bien diferenciados. El primero, de cooptación de los partidos de origen y tradición popular por los poderes fácticos, que intentaron gobernar a través de ellos, con fuertes contradicciones durante la gestión de Raúl Alfonsín, y en armonía durante la década de Carlos Menem, quien hizo propias con entusiasmo las políticas que le impusieron, una vez que vio cómo afeitaban en seco a su predecesor. Pero esa conformidad entre poder económico y gobierno electo fue excluyendo cada vez a más personas hasta estallar con la crisis de fin de siglo. Esto dio lugar a una segunda etapa, que dura hasta hoy, en la que uno de los partidos históricos volvió a las fuentes y expresó desde el gobierno los intereses que lo sustentan, lo cual lo puso en conflicto con lo que Eduardo Basualdo caracterizó como la oligarquía diversificada, que con actividades tanto agropecuarias como industriales y financieras, conduce a la burguesía en su conjunto y enfrenta a la alianza populista. La participación en la marcha de la Sociedad Rural, las Confederaciones Rurales, el Foro de Convergencia Empresaria, la Asociación Empresaria y la Unión Industrial es elocuente sobre su nivel de involucramiento.

Durante el debate en las comisiones de la Cámara de Diputados por la reforma a la ley de Inteligencia Nacional, el Secretario Oscar Parrilli recordó la marcha del Corpus Christi de junio de 1955 y los bombardeos que asesinaron a 300 personas en la Plaza de Mayo. La composición social de ambas manifestaciones es la misma, así como de otras previas y posteriores. Pero el sentido de cada una es muy distinto. Las velas que iluminaban los reclamos punitivistas del ex ingeniero Blumberg se encendieron cuando Néstor Kirchner no había cumplido un año en el gobierno, al que accedió con menos votos que Arturo Illia cuarenta años antes. El intento de la Sociedad Rural por desabastecer las ciudades y forzar una capitulación del gobierno y la sugerencia risueña de su presidente de entonces, Hugo Biolcati, de que el vicepresidente Julio Cobos debía asumir la presidencia, se produjeron en el primer año de gobierno de CFK. Esta marcha, en cambio, ocurre en su último año, cuando se discute en plena competencia electoral quién la sucederá. Desde Atucha, la presidente dijo ese mismo día que “tenemos que garantizar que quien conduzca este Estado argentino tenga las mismas ideas sobre autonomía, sobre soberanía, sobre ingreso popular, sobre el trabajo de los argentinos, sobre la ciencia y tecnología”. Los indignados del jueves que son los resfriados del fin de semana piensan lo contrario. Si el final apocalíptico del gobierno de Raúl Alfonsín fue parte de la educación presidencial, para que Carlos Menem entendiera los límites de lo que le estaría permitido, los pujos judiciales y económicos contra el gobierno de Cristina van dirigidos a impedir la continuidad programática que ella reivindicó o en todo caso a ilustrar a todos los interesados sobre los costos del atrevimiento. Maurizio Macrì es el único precandidato que no necesita de esa advertencia: él proviene del otro lado del mostrador. En sus seis años de gobierno ya cuadruplicó la deuda externa de su municipio. Esta semana incurrió en un notable acto fallido: “Gobernar es escuchar, lo contrario a lo que piensa la presidente”, dijo el alcalde porteño, aún bajo proceso por escuchas ilegales a una víctima del atentado a la DAIA.

Cuestión de tamaño

Cada policía midió lo que le convenía a su respectivo gobierno, lo cual no es un signo de madurez institucional. Un cálculo alternativo fue realizado por La izquierda Diario, la publicación electrónica del Partido de los Trabajadores Socialistas que integra el Frente de Izquierda y los Trabajadores: desestimó tanto los 400 mil manifestantes que vio la Metropolitana (“Clarín y la Policía de Macri desafían las leyes de la física. En la pelea por la opinión pública, el ridículo no tiene límites”), como los 50.000 de la Federal. Con métodos para el cálculo de multitudes desarrollados por la Universidad de California hace medio siglo, tomando en cuenta las dimensiones del lugar donde ocurren los hechos y la fluidez o densidad de la multitud, y perfeccionados luego con nuevas tecnologías, concluye que si se toma en cuenta la superficie de la Plaza de Mayo que fue ocupada por la marcha (con los canteros vacíos), las nueve cuadras desde el escenario hasta el punto de inicio en Plaza Lorea, por Avenida de Mayo y las laterales Yrigoyen y Alsina, y se tiene en cuenta que el uso de paraguas aleja cualquier posibilidad de agolpar cuatro personas por metro cuadrado, “el número arrojado por la Policía Metropolitana y publicitado por Clarín es absolutamente ridículo. Un cálculo que desafía no sólo los métodos científicos más actuales, sino principios básicos de la física, desde Pitágoras a Newton”. Para LID el número real de asistentes fue de entre 70 y 90.000. Esta es una cifra nada desdeñable si se piensa que las movilizaciones conmemorativas de cada 24 de marzo atraen a un número que según los años oscila entre 50 y 100.000 personas. Según el diario de la izquierda, quienes participaron eran “básicamente de la clase media capitalina, votantes de Macri, de promedio de cuarenta y cincuenta años para arriba”. Incluían “parejas y grupos familiares, cincuentones, a veces del brazo de sus hijas (sólo allí se vio la mayor participación juvenil)”. LID también señaló “la notoria ausencia de contingentes juveniles, que sí había mostrado la oposición en el conflicto del campo del 2008, donde sectores universitarios marchaban en ciudades como Rosario o Córdoba. Pareciera que, generacionalmente, la derecha no tuviera futuro”. Al cotejar distintas situaciones también indica que los fiscales de Comodoro Py no son “nuevas figuras convocantes de la oposición”, reconocidas por la multitud, como Alfredo De Angelis durante el lock out agrario o Blumberg en 2004. Advierte también la ausencia de “sectores de la clase media ‘progresista’ del tipo de los viejos votantes de Pino Solanas. Distinto que en el 2008 en Palermo o en el Monumento a la Bandera rosarino, esta vez la clase media tuvo una expresión más acotada, casi exclusivamente de los sectores más pudientes”. Con comprensible pudor trotskysta omite cualquier referencia a las banderas rojas que en 2008 acompañaron a la Sociedad Rural y que esta vez se abstuvieron, lo mismo que el grupo político y sindical de Víctor De Gennaro y Claudio Lozano. Añade que la marcha tuvo réplicas menores en Córdoba, Tucumán, Rosario, Mendoza, Mar del Plata y otras ciudades “que expresaron el mismo y acotado sector social”. Este nuevo episodio en la guerra de desgaste contra el Gobierno no le parece que se acerque a definiciones, pese al salto de intensidad de la imputación a la presidente por parte de Nisman. En una columna de análisis, La Izquierda Diario explica que si en las jornadas de fin de siglo “la clase media actuaba como uno de los motores de un cuestionamiento profundo al régimen político y social imperante, el fin de ciclo kirchnerista la encuentra motorizando la construcción de una oposición patronal gorila y reaccionaria. Un giro copernicano que viene a (re)demostrar la volatilidad de una clase social fragmentada a la que la ideología ‘ciudadana’ –que expresó esta movilización– calza como anillo al dedo. La relativa estabilidad económica, aún con elementos recesivos, juega su papel. La atadura de las finanzas provinciales al estado nacional actúa como una suerte de látigo para quienes quieran sacar los pies del plato. Por ahora, parece que todo seguirá igual, aunque las tensiones internas sigan creciendo en cuotas. La ausencia de la perspectiva ‘golpista’ implica, necesariamente, la guerra de desgaste, lo que supone imponer condicionamientos al gobierno y, a largo plazo, liquidar al kirchnerismo como factor político. Pero sin una recuperación de figuras políticas fuertes en la oposición, el plan renguea”. Revivida después de la muerte de Nisman, la oposición levantó su moral. “Pero los paraguas no pudieron ocultar los límites del contenido social y político de esa multitud. Las clases medias altas que hegemonizaron la jornada no parecen tener ningún efecto expansivo, como en alguna medida habían logrado el ingeniero Blumberg en 2004 y los empresarios rurales en 2008. Quienes llevaban los paraguas hace tiempo eran antikirchneristas. Los fiscales ‘silenciosos’, por su parte, tienen prontuarios que complican cualquier plan de convertirlos en héroes populares. Y además, la oposición que fue parte del 18F tiene la contradicción de que la marcha era una, pero son siete los pre-candidatos a presidente que intentan capitalizarla. Es mucho”, se cierra otro de los artículos de LID. El diario también realizó una encuesta entre sus lectores. El 10 por ciento se pronunció “a favor del 18F”; el 36 por ciento “en defensa del gobierno” y el 54 por ciento ni con uno ni con los otros.

Políticos y antipolítica

El hijo del historiador José Luis Romero escribió que los políticos asistieron a la marcha “vestidos de ciudadanos y mezclados con el resto”. Al hacerse cargo con su disimulo del discurso de la antipolítica ponen límites a la movida impulsada por Comodoro Py con generoso apoyo empresarial, del sindicalismo opositor y del Grupo Clarín, que el viernes consiguió un nuevo fallo para seguir sin adecuarse a la ley audiovisual. Así, el rol político que asume la justicia coincide con la despolitización de los políticos. Esto funciona para la exaltación emocional ante una muerte que se intenta presentar como un asesinato y endilgarselo al gobierno. El problema es que ni en las PASO ni en las elecciones generales los conmovidos manifestantes encontrarán boletas de TN ni de la exposa del fiscal Nisman, sino de esos políticos que no osan decir su nombre y que se disimulan entre el gentío. Sus alternativas pasan por perder, una vez más dispersos, o ganar con la unión que les reclama desde hace años el Grupo Clarín, y reproducir la catástrofe de la Alianza, que a duras penas alcanzó los dos años de gobierno. El escritor Marcelo Birmajer calificó la muerte de Nisman como “el suceso más luctuoso de la democracia, desde 1983”, con el único precedente del loperreguismo, y la atribuyó a la “tradición peronista”. El guionista de Lanata tal vez estuvo distraído durante los 24 meses que alcanzó a durar el último gobierno ajeno a esa tradición abominada: comenzó con dos muertos y 40 heridos por la Gendarmería en el puente que une Chaco con Corrientes el 17 de diciembre de 1999, y terminó con otras tres docenas de muertos en todo el país durante la caza al hombre del 19 y 20 de diciembre de 2001.

lunes, 16 de febrero de 2015

Juan Facundo Quiroga



Año de mil ochocientos
Año de mil ochocientos
treinta y cinco de año nuevo
Quiroga perdió la vida
el dieciséis de febrero.
Era un jefe ‘e tanto influjo
era un jefe ‘e tanto bando
que tenía muchos pueblos,
muchas líneas a su mando.
Se dirigió pa Santiago
como lo cuenta el autor;
tan sólo va procurando
que tengamos redención. (1)
Hizo bajar los gobiernos
rindiéndoles obediencia:
-Aquí estamos, señores.
-Aquí estamos vuecelencia
debajo de sus banderas,
rendido a vuestra presencia.
Los he hecho bajar – les dice-
en una misión verdadera,
para que se unan los pueblos
y nunca jamás haiga guerra.
Ya se dentran a sus planes
y en sus volcanas (sic) papeles (2)
y le trabajan un bando,
se lo dan a Santos Pérez. (3)
Que lo ha de dar asesinado.
Santos Pérez le responde:
-Sin firmas de vuecelencia
no lo puedo hacer, señores,
porque en el momento pierdo
mi crédito y mis honores.
Ya se dentran a sus planes
y en sus volcanas (sic) papeles,
después de concluido estaba
se lo dan a Santos Pérez.
Vicente Reina le dice: (4)
-Ya te lo hemos ordenado
y si no lo haces así
tú eres el asesinado.
Reinafeses le decía:
-Tú eres un jefe de empresa
de Quiroga esperamos
que nos traigas la cabeza.
Salieron los tulumbianos (5)
sin que un punto se desliza
porque los van engañando
que es pa’hacer una pesquisa.
Enfrente de Ojo de Agua
una mujer le avisaba:
-Ha pasado Santos Pérez
con toda su tropa armada.
Enfrente del Totoral
una mujer le decía:
-Mire, señor general,
que hoy día pierde su vida.
No se dispuso él a creer
lo que le había ‘e suceder;
que le quitaran la vida
sin que él diera el porqué.
En la posta de don Hacha
le demoran el auxilio
dándole el trecho a los gauchos
que estuvieran prevenidos.
El postillón tenía un hijo
de la edad de siete años
que lo mandaba su padre
que volviera los caballos.
En la posta de Anteguasa (6)
le salían de emboscada
y los cargaban los gauchos
como perros en majada.
Quiroga tenía un loro
que en el discurso no falto
lo que veía esa gente
gritaba que hicieran alto.
-Al que gobierne esa gente
quiero conversar con él.
Atiendan, señores míos,
que esto les quiero contar,
no le hacían caso a la gente
¡Le han de hacer a un animal!
Allí se allegaba Santos
con unas palabras necias
y le decía a Quiroga
-Dese preso, vuecelencia.
Para que sirva de ejemplo
lo hizo acostar en el suelo
y lo degolló aquel hombre
como degollar cordero.

1) La difícil situación planteada en Buenos Aires debido a la negativa de Rosas a aceptar por segunda vez la gobernación de Buenos Aires, favoreció a los conspiradores unitarios, cuya influencia llegó hasta las provincias más alejadas del Norte. Los gobiernos de Tucumán y Salta se acusaban mutuamente de apoyar las conspiraciones unitarias. El gobierno de Buenos Aires creyó conveniente enviar un mediador que resultó ser Facundo Quiroga, por ese entonces en dicha ciudad. La reunión para solucionar el enfrentamiento se hizo en Santiago, el 3 de enero de 1835, y culminó con un tratado de compromiso entre Salta, Santiago del Estero y Tucumán el 6 de febrero de ese año.
2) Es probable que la versión correcta sea “ya se vuelcan a papeles”.
3) El capitán Santos Pérez fue el jefe de la partida que asesinó a Quiroga. A pesar de la matanza general para evitar testigos, el correo Agustín Marín y un asistente del doctor Ortiz, acompañantes de Quiroga, que llegaron poco después, pudieron observar lo ocurrido. Estos, más tarde, acusarían a Santos Pérez y a las milicias cordobesas. Dirá Rosas: “el general Quiroga fue degollado en su tránsito de regreso para ésta (Buenos Aires) el 16 del pasado último febrero (…) ¿He conocido o no el verdadero estado de la tierra? Pero ni esto ha de ser bastante para los hombres de las luces y los principios. ¡Miserables! (…) Ya lo verán ahora. El sacudimiento será espantoso y la sangre argentina correrá en porciones”.
4) Se refiere al coronel José Vicente Reinafé, gobernador de Córdoba en la época en que fue asesinado Quiroga. Junto con sus hermanos, fue juzgado en Buenos Aires y, encontrado culpable de haber ordenado la matanza de Barranca Yaco, fue ejecutado con sus hermanos y los demás integrantes de la partida.
5) La partida comandada por Santos Pérez estaba integrada por milicianos de Tulumba.
6) Inti-Huasi.



*Juan Facundo Quiroga, (San Antonio, La Rioja, Intendencia de Córdoba del Tucumán, Virreinato del Río de la Plata, 27 de noviembre de 1788 – Barranca Yaco, Córdoba, Argentina, 16 de febrero de 1835)

domingo, 8 de febrero de 2015

Martín Miguel de Guemes


"Vengan enhorabuena esos imaginarios regimientos de Extremadura, Gerona, Cantabria, Húsares y Dragones y vengan también cuantos monstruos abortó España con su Rey Fernando a la cabeza; a nada temo, porque he jurado defender la independencia de América y sellarla con mi sangre.
Todos estamos dispuestos a morir primero, que sufrir por segunda vez una dominación odiosa, tiránica y execrable"

*Martín Miguel de Guemes




*Martín Miguel Juan de la Mata de Güemes Montero Goyechea y la Corte (8 de febrero de 1785, ciudad de Salta - 17 de junio de 1821, Cañada de la Horqueta, provincia de Salta)

jueves, 5 de febrero de 2015

Violeta Parra


El «albertío»

(Violeta Parra*)

¡Yo no sé por qué mi Dios
le regala con largueza
sombrero con tanta cinta
a quien no tiene cabeza!

¿A’ónde va el buey que no are?
¡Responde con prontitud!
¡Si no tenís la contesta,
prepárate el ataúd!

Vale más en este mundo
ser limpio de sentimientos;
muchos van de ropa blanca
y ¡Dios me libre!… por dentro.

Yo te di mi corazón:
¡devuélvemelo enseguí’a!
A tiempo me hey da’o cuenta
que vos no lo merecías.

Hay que medir el silencio,
hay que medir las palabras,
sin que’arse ni pasarse
medio a medio de la raya.

Yo suspiro por un Peiro,
¡cómo no hey de suspirar,
si me ha entrega’o la llave
de to’o lo celestial!

Y vos me diste el secreto
de chapa sin cerra’úra,
como quien dice, la llave
del tarro de la basura.

Dejate de corcoveos,
que no nací pa’ jinete:
me sobran los Valentinos,
los Gardeles y Negretes.

Al pasito por las pieiras,
cuida’o con los juanetes,
que aquí no ha nací’o naide
con una estrella en la frente.

Discreto, fino y sencillo,
son joyas resplandecientes
con las que el hombre que es hombre
se luce decentemente.

«Alberto –dijo– me llamo».
Contesto: «lindo sonido,
mas para llamarse Alberto
hay que ser bien ”albertío”».




*05 de febrero de 1967: Acaba con su vida la folklorista chilena Violeta Parra
Poeta, cantora, pintora, escultora y ceramista, fundadora de la música popular chilena y una de las folkloristas más importantes de América.
Fue autora de obras emblemáticas que alcanzarían gran popularidad, integrando en la actualidad el repertorio de numerosos cantantes, como "Casamiento de negros", "Yo canto a la diferencia", "Por qué los pobres no tienen", "Paloma ausente", "Arriba quemando el sol", "Gracias a la vida", "Qué he sacado con quererte", "Miren cómo sonríen", "Qué dirá el Santo Padre", "Volver a los 17", "Rin del angelito", "El Albertío", etc. Realizadora de una remarcable labor de recopilación del folclore popular chileno plasmada en las mil canciones que integran su libro "Cantos folklóricos chilenos", fue autora también del volumen "Décimas", publicado luego de su muerte por su hermano, el poeta Nicanor Parra.
Creadora de una obra plástica expuesta y elogiada en diversas partes del mundo, junto con sus hijos Isabel y Angel y los folcloristas Víctor Jara, Patricio Manns y Rolando Alarcón instaló una carpa en la comuna La Reina, al este de Santiago, con el propósito de convertirla en centro difusor de la cultura folclórica, y en la que a los 49 años de edad se suicidó deprimida por motivos sentimentales y el escaso eco de su propuesta cultural.
Había nacido en San Carlos, Chillán, el 4 de octubre de 1917.

miércoles, 4 de febrero de 2015

PARA SU DIVULGACIÓN




PARA SU DIVULGACIÓN
Amigos:
Puede que les llamara la atención la ausencia durante estos tres días de mis posteos. Acabo de llegar a la ciudad de Córdoba después de ser detenido por la policía el sábado 31 a las 15 hs y liberado anoche a las 0:35 hs. Les comento, y ruego divulguen, que fui detenido (más de tres días) por la policía de Arroyito mientras desarrollaba mis tareas profesionales. Con esta mafiosa y patotera policía desde hace muchos años hemos desarrollado una enemistad mutua y manifiesta por mi continua defensa contra el maltrato policial de las cuales dejaba constancias en el libro de guardia. Una discusión de fuerte tono con un policía inexperto fue la excusa para mi detención. Naturalmente fui golpeado en tres oportunidades con las esposas puestas.
La oportuna llegada del director del hospital Dr. Amadeo Bettini, la denuncia inmediata por la radio local y la pronta intervención del intendente local Mauricio Andrés Cravero y la representante legal de la Municipalidad Dra. Mendoza a quienes agradezco infinitamente, me libró de las golpizas salvajes, pero no de la detención.
Alentado por las mismas autoridades mencionadas iniciaré el juicio penal por maltrato de los cuales mantendré informado a todos los amigos por este medio y en la revista que dirijo “CORDOBA POLÍTICA”.
La reflexión es que seguiré en las villas y con “los chicos de la gorra” luchando contra el maltrato policial que recientemente se cobró otra víctima
De nada sirve que el Comisario, presionado por el revuelo y la presión política, intentara justificarse, visitándome amistosamente fuera de su horario de trabajo, señalando que “cuando yo estoy estas cosas no ocurren”. Si así fuese, cosa que dudo, lo suyo es una cruda confesión de que está en conocimiento de estos atropellos cuando é no está. El Jefe de la guardia, un joven de cutis bien trigueño, intentó darme una clase de “filosofía de la negritud”. “No somos lo mismo nosotros que los negros de mierda. A ellos los fajamos para tenerlos más blanditos”. El subcomisario no dejaba de insultar y provocarme y ante mi negativa a callarme me dio un puñetazo en el estómago. Cosa que imitó uno que estaba de civil y a quien reconozco por ser autor de una herida contusocortante a un joven detenido que constaté en la cárcel y que dejé debidamente sentada en el libro de guardia hospitalario.
Como lo expliqué públicamente por la radio, y me reitero permanentemente en esta página y en mi revista: para reducir la delincuencia en la calle hay que sacarlas de las comisarías y de la Casa de Gobierno de Córdoba. Siempre empezando por la cabeza de esta mafia narcopolicial y patotera que tiene como su máximo referente al gobernador José Manuel de la Sota.

LA DIVULGACIÓN DE ESTA NOTA AYUDARÁ A MI PROTECCION FÍSICA

martes, 3 de febrero de 2015

03 de febrero de 1813: Combate de San Lorenzo.


03 de febrero de 1813: Combate de San Lorenzo.

Frente al monasterio de San Carlos, en San Lorenzo, aguas arriba de Rosario, los granaderos del coronel José de San Martín derrotan a una expedición realista que, en once buques, asolaba las costas del Paraná. En esta batalla sucedió el acto heroico del soldado Cabral quien, en medio del combate, dio su vida para evitar que un español clavara su bayoneta en el Libertador San Martín y lo matara. En un plano estrictamente militar, se trató de un combate menor, tanto de comparárselo con la batalla que pocos días después libraría Belgrano en Salta como con las que el propio San Martín sostendría luego en Chile. Su importancia estriba en que a partir de ese momento los españoles ya no prosiguieron con sus incursiones por el Paraná y, fundamentalmente, en que se trató del bautismo de fuego del regimiento que protagonizaría gran parte de la gesta independentista sudamericana.

lunes, 2 de febrero de 2015

José Tedeschi


2 de febrero de 1976 – Es secuestrado José Tedeschi, sacerdote obrero, mártir de los «villeros»
en Argentina.


José Tedeschi - relata el padre Roberto de la Parroquia del Hospital de Quilmes - interpretó que seguir a Jesús es comprometerse, juntarse, compartir el sufrimiento de los de abajo.
Cuando José es designado párroco de Don Bosco, se acerca a la Villa Itatí, conoce y se entera de las condiciones de vida de los que allí viven y hace su opción de vida. Predica el evangelio con quienes considera los preferidos de Jesús.
José abandona la tranquilidad y comodidad de Don Bosco. Se metió. Se comprometió. Se fue a vivir a la Villa Itati. Se jugó la vida como Jesús.
Vivir de esta forma el evangelio y haberse unido a una mujer del lugar le valió la marginación y menoscabo de los fariseos del momento. Defender, acompañar a los pobres, vivir con ellos, lo enfrentó con el poder político de la época.
Esto ocurrió en el gobierno de Isabel Perón y su nefasto ministro López Rega quienes finalmente lo secuestran y asesinan el 2 de febrero de 1976.

Cuenta Juanita, compañera de José: “En los años ´70 la Villa Itatí estaba en proceso de formación. Acudían al lugar gente del interior del país y de países limítrofes, paraguayos, chilenos en búsqueda de un lugar para vivir, corridos de sus lugares de origen por la necesidad.
No había alcantarillas, ni agua, ni luz, ni calles y tampoco veredas. Tampoco se oficiaba la misa en el lugar, había que ir a la Parroquia de Don Bosco.
La situación de hacinamiento y privaciones era angustiante y cotidiana. En esos tiempos se conseguía trabajo pero la mayoría de las personas no tenían documento. Ser villero e indocumentado dificultaba acceder al trabajo.
En ese momento, José Tedeschi es asignado a la parroquia de Don Bosco.
Comienza su accionar nuestro padre José haciendo misa dentro de la Villa, lo cual lo lleva a enfrentarse a la jerarquía eclesiástica quienes deciden que para escuchar misa había que ir hasta Don Bosco. También le recomiendan no frecuentar mucho la “Villa”. Lejos de acatar las órdenes de la jerarquía, nuestro José se acerca y profundiza su vínculo con el pueblo pobre y marginado, enfrentamiento que lo lleva a abandonar la estructura eclesiástica y decide ir a vivir a la Villa para
profetizar desde allí su concepción del evangelio. Su opción preferencial por los pobres era una tarea la cual no hacía solo, existía en nuestro país lo que se dio a llamar el “Movimiento de los Curas del Tercer Mundo”.
En el plano político social se abrieron grandes expectativas con la llegada al gobierno del Peronismo. Nuestro Padre José no es ajeno a este clima de participación popular y lo hace desde su profunda convicción cristiana. Comienza con ayudar a los recién llegados a levantar humildes casillas, continúa con peticiones a las autoridades para conseguir documentación, brega e impulsa la organización de las personas para buscar soluciones comunes, activa la participación para la organización de una cooperativa de consumo.
Propone y consigue soluciones a las necesidades más inmediatas: agua, luz y salud.
Al padre José acudían personas con necesidades apremiantes y él
siempre encontraba alguna solución. Su estilo era de amplia participación comunal. Todas las decisiones eran debatidas por los interesados.
2/2/1976
En ese momento, cuenta Juanita, se estaciona el “fatídico” falcon frente al mismo y rápidamente bajan dos enormes esbirros que preguntan:
-¿Quién es José Tedeschi?
José responde: - Soy yo.
Lo toman violentamente y lo arrastran hacia el auto, José se resiste y aclama por ayuda. Prestamente acude Juanita que, embarazada de 9 meses, increpa fieramente a los asesinos que la apuntan con un arma.
Uno de ellos ordena:
- Cargála a ella también.
José cesa la resistencia exclamando: -A ella no.
Es golpeado fieramente en el rostro y cargado en el falcon. Las últimas palabras que recuerda Juanita de él son:
-Salvá a la Beba.
Esto sucedió el 2 de febrero de 1976. El día 18 de ese mismo mes José aparece asesinado con su cuerpo terriblemente mutilado.
Su hija Itatí nace el 19 de febrero.
Se cumplió el deseo de José de que su hija lleve el nombre de la Villa que él quiso tanto.