Un espectro recorre Europa, el flaco espíritu de la
desocupación, la dolorosa resaca del opio monetarista, todos los miserables
homúnculos que gobiernan la vieja Europa se apelotonan para lamer las últimas
gotas de sangre del anémico pueblo griego; hoy reprimieron y expulsaron a los
inmigrantes; mañana reprimirán hasta el silencio a sus trabajadores, pasado
llevaran a la ruina a su burguesía, al otro día los homúnculos testaferros de
los bancos extranjeros cargaran muchísimos camiones de caudales rumbo al
aeropuerto, Grecia habrá muerto.
Zeus Xenios protege a quienes están lejos de su patria;
castiga a quienes vulneran la sagrada norma de la hospitalidad, pero en pleno
siglo 21 no será un rayo de la forja de Hephaistos el que de cuenta de esta
transgresión, sino la canalla que maneja el carro Europeo –ya desbocado- al
acantilado. En la cuna de la democracia los pagarés valen mas que las boletas
de votación...
Fernandolui
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