La ofensiva impensada.
(al compañero Hugo)
Estábamos en bolas, pero en bolas
de verdad Hugo, con el país a medio vender, sin dirigentes, sin esperanzas.
¡Sin ideas Hugo!
Sin ideas. Porque la patria
grande, la unidad, el patriotismo, eran sueños aún, ni siquiera habían vuelto a
ser ideas, eran la nostalgia de las ideas. Estábamos en bolas Hugo, solos como
loco malo, voceando giladas en el club del trueque, cronometrando el fin de la
historia; cuando nos enteramos que allá, al norte de ese sueño de Patria Grande
apareciste vos.
Pero no apareciste, te construiste,
te construyeron los venezolanos a fuerza de masticar derrotas; te hicieron así,
enorme.
…Y esos sueños que sobrevivían
duramente -con Fidel como bandera- se despertaron de golpe a una ofensiva
impensable, a crear el socialismo, si, EL SOCIALISMO Hugo, el socialismo que
era entonces apenas una palabra acosada por el olvido.
A crear un socialismo de factura
propia, un socialismo de nuestra América moncha, un socialismo morocho y
traspirado.
Eras irreal Hugo, acá gobernaban
una sarta de tipejos que hoy no te voy a nombrar, pero que hacían que un tipo
como vos, no pareciera posible. Pero ahí estabas, demostrando, mostrando
caminos, cambiando la política para siempre, gobernando.
Gobernando a fuerza de
socialismo, a cambio de las consabidas sonrisitas obsecuentes.
Gobernando a fuerza de pueblo a
cambio de las trilladas frotadas con la prensa de inteligencia de la embajada.
Gobernando a fuerza de patria, de
patria que es pueblo y reinaugurando el concepto de democracia, reinventando un
gobierno plebeyo, chamuyando horas, como solo aquel barbudo antes que vos había
hecho; chamuyando en criollo…
Ahí estabas Hugo, enseñándonos
lecciones inagotables e inolvidables. Recordándonos lo que sabíamos y
mostrándonos realidades sobre cosas que apenas intuíamos Hugo.
Como aquella vez que los
escuálidos, que por entonces para nosotros eran sencillamente gorilas (y que
siguen siéndolo), pretendieron escamotearle el poder al pueblo, birlarle sus
conquistas, como tantas veces habían hecho.
Me acuerdo Hugo, que nos juntamos
como pudimos, necesitábamos noticias; era a todo o nada, había que ver si un
pueblo puede o no puede Hugo, había que saber de una vez para siempre si la
política de verdad pertenece al pueblo, o si se la pueden arrebatar a piacere
con un par de mentiras y otro par de amenazas.
Se hizo la noche en que te
secuestraron Hugo, te robaron a tu pueblo, que entonces ya también éramos
todos, se hizo la noche en nuestros ojos rojos, rotos por la desilusión,
angustiados por la falta de noticias, pero también se hizo la mañana, la de tu
vuelta Hugo, la mañana maravillosa en la que finalmente se rompieron las
barreras que los monopolios guardaban celosamente y amanecimos descubriendo que
era verdad, que un pueblo puede vencer, que desde entonces un pueblo no puede
menos que eso.
Desde entonces estuviste siempre
Hugo, cuando mi país empezó la larguísima reconstrucción de su dignidad estabas
allí Hugo, vos y el viejo, acompañándonos, como aquel día que le reventamos
entre todos el culo de una patada al borracho de la CIA y a su proyecto del
ALCA. ¿Te acordás Hugo? “…si soplamos tres veces hacia arriba se va la lluvia…”
Estabas ahí, con el Flaco, con nosotros.
…y ahora te viene el trabajo mas
pesuti Hugo, ahora sos todos, ahora Chávez somos todos y ese si que es un
laburo; ahí esta el flaco pa que lo hagan juntos, como antes; pero igual es un
re laburo Hugo.
Y a estas alturas si no se
entiende lo que escribo me importa poco, simplemente te lo quería decir Hugo,
se los quería decir Chávez, nos lo quería decir, Comandante.
Fernandoluis
2 comentarios:
Gracias , Luis por expresar lo que todos sentimos y gracias Comandante por permitirme volver a soñar !!!!!!
Muchísimas gracias por expresar lo que compartimos todos y todas los Venezolanos
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