martes, 31 de julio de 2012

“La soledad de nuestros pueblos ha terminado”


Cristina Fernández aseguró que la incorporación de Venezuela al bloque regional constituye “un día histórico”. Sostuvo que el crecimiento de la región “exige crear los mecanismos institucionales que constituyan en indivisible este bloque de poder”. Además, remarcó que la crisis internacional fue generada por “los grandes centros financieros” y no por los productores de alimentos, al tiempo que reclamó a los países centrales terminar con los paraísos fiscales.
La presidenta Cristina Fernández fue la última oradora de la declaración conjunta de  los mandatarios que asistieron a la Cumbre del Mercosur en Brasilia, en la que se oficializó la incorporación de Venezuela al bloque comercial.
La jefa de Estado argentino aseguró que la soledad a la que hizo referencia el mandatario venezolano Hugo Chávez “era una soledad de décadas de las sociedades de la América del Sur, que habían sido despojadas de sus derechos”, por las dictadura militares y, durante la década del ’90, por los gobiernos neoliberales. “Tu soledad no era una soledad personal ni gubernamental: era una soledad política y cultural de nuestra región, de la América del Sur”, enfatizó, dirigiéndose a Chávez. Y remarcó que “fueron décadas de soledad, luego del derrocamiento de gobiernos populares como el de Perón en Argentina, o el de Getulio Vargas en Brasil”.
“Hoy estamos ante un día histórico”, aseguró Cristina Fernández, al destacar el ingreso de Venezuela al Mercosur, del cual, resaltó que “en muchas de nuestras sociedades se descreía”.
La mandataria expresó que Chávez “comenzó el fin de su soledad con la llegada del presidente Lula en Brasil, y continuó con la asunción en Argentina de Néstor Kirchner”. “Finalizaron las soledades, y comenzaron los tiempos de los modelos nacionales, populares y democráticos”, enfatizó.
La Presidenta de la Nación subrayó que el bloque “constituye, después de Estados Unidos, China, Alemania y Japón, la quinta economía del mundo”. Indicó que es “una buena noticia”, pero reconoció que esa situación “exige crear los mecanismos institucionales que constituyan en indivisible este bloque de poder”.
La crisis en Europa
La Jefa de Estado sostuvo que “ha retornado nuevamente desde la Europa en crisis la idea de poner un precio tope a los commodities”. “Desde la autoridad que nos da ser los mayores productores alimentarios, les decimos que se queden tranquilos, que vamos a proveer a la seguridad alimentaria”, advirtió.
Pero resaltó que “el mundo no está así, por la soja, el trigo o el maíz, sino por la inseguridad financiera, que la hicieron ellos con los bonos basura”. “Cada vez se va desnudando más que la crisis fue originada en los grandes centros financieros”, remarcó.
Cristina Fernández sostuvo que parte de la crisis se puede explicar por “los grandes paraísos fiscales, donde están 400 billones de dólares, muchos de ellos provenientes de nuestros países”. “Les decimos que se queden tranquilos, que vamos a producir más y mejores alimentos. Que lo que nosotros les pedimos a ellos es seguridad financiera: basta de paraísos fiscales, basta de seguir protegiendo a los que fugan divisas de sus países”, remarcó.
La defensa de los intereses populares
Por último, la Presidenta admitió que los mandatarios de la región podrán “haber tenido errores”, pero sostuvo que “siempre trabajamos para los que menos tienen, y no para los que más tienen”. “Podemos cometer errores, pero nunca nos vamos a equivocar de modo tal que tomemos decisiones que a sabiendas perjudiquen a los intereses populares, porque tenemos una historia de vida consagrada a luchar porque esta tierra, la América del Sur, sea cada vez más justa, más igualitaria, y más equitativa”, aseguró.
“No nacimos ninguno de los cuatro de un repollo, formamos parte de proyectos colectivos, no somos proyectos individuales, hay detrás nuestro partidos y movimientos sociales con mucha historia”, afirmó Cristina Fernández, en referencia a los cuatro presidentes presentes. Y concluyó: “Representamos esa fuerza histórica de nuestros pueblos, que se juntan en estos 200 años de historia, para marcar que la soledad ha terminado, porque nos hemos encontrado”.
La presidenta Cristina Fernández estuvo acompañada durante la declaración conjunta en Brasilia, por la mandataria local, Dilma Rousseff, y sus pares de Uruguay, José Mujica, y de Venezuela, Hugo Chávez.


"y en definitiva la muerte no duele"



Rodolfo Ortega Peña, relato del primer asesinato de la Triple A

Por Marcelo Duhalde

Intentamos hablar con Rodolfo para convencerlo de que se tenía que cuidar, que las amenazas estaban llegando cada vez más fuertes.

Estábamos en un bar a pocas cuadras del Sindicato de Farmacia, donde acabábamos de terminar una reunión bastante numerosa para organizar el homenaje a los compañeros fusilados en Trelew.

Eran aproximadamente las dos de la mañana del 31 de julio de 1974.

Habíamos quedado Rodolfo Ortega Peña, mis hermanos Eduardo Luis y Carlos María, Haroldo Logiurato, algún otro compañero y yo.

Intentamos hablar con Rodolfo para convencerlo de que se tenía que cuidar, que las amenazas estaban llegando cada vez más fuertes, los seguimientos eran muy notorios y debía tener algunas pautas de seguridad. Nosotros pretendíamos que no se expusiera tanto.

Rodolfo no quería saber nada, sostenía que la única manera de hacer su actividad en defensa de los más humildes, de los más necesitados, era de la manera que lo hacía. Finalmente, terminó la conversación de mala manera diciéndonos: "y en definitiva la muerte no duele".

Alrededor de las 8 de la noche de ese mismo día, sonó el teléfono en el despacho de Rodolfo de la Cámara de Diputados, era un supuesto periodista que preguntó si se iba a quedar mucho tiempo más porque quería verlo para hacerle unas preguntas.

Luego comprobamos que el llamado era para confirmar que él todavía no hubiera salido porque lo estaban esperando en la calle.

Un rato después, Rodolfo salió caminando del Congreso con su compañera Helena Villagra. Fueron caminando por Callao, desde Rivadavia hasta Santa Fe, y allí doblaron media cuadra hacia Riobamba donde entraron en una pizzería, de la que salieron aproximadamente a las 22.15.

Con la misma confianza con la que se manejaba, Rodolfo se subió a un taxi que estaba libre parado en la puerta, aparentemente desde hacía un tiempo, y le dio la dirección adonde iban.

El taxista repitió en voz alta y de manera notoria "Carlos Pellegrini y Juncal". Pocas cuadras más adelante, Rodolfo le pidió que apagara la luz interior del coche que el chofer había dejado encendida.

Estos y otros datos conocidos con posterioridad nos confirmaron la participación del taxista en el operativo para asesinar a Rodolfo.

Al llegar a la calle Carlos Pellegrini y Santa Fe, el taxi dobló y otro vehículo que venía detrás, sin que los pasajeros lo notaran, se atravesó e impidió que los otros automóviles que venían pudieran avanzar por Pellegrini.

Al cruzar Juncal el taxi paró y un coche que venía casi a la par se le atravesó. Bajó de él un hombre con una media de mujer en la cabeza y una ametralladora en la mano con la que disparó 23 tiros o más, 8 de los cuales fueron en la cabeza, que hicieron blanco en Rodolfo.

Esto nos hizo comprobar que estaban al tanto de las conversaciones mantenidas en su despacho intentando que Rodolfo usara el chaleco antibalas que le había ofrecido el compañero Ricardo Beltrán.

En 1975, ya camino a la dictadura, cuando José López Rega había terminado su trabajo siniestro de sangre y de muerte partió hacia Madrid acompañado de sus dos principales cómplices.

Ellos eran Morales y Almirón.

Pasados algunos meses, el subcomisario de la Policía Federal Rodolfo Eduardo Almirón frecuentaba un local de moda en Madrid en la calle Fuencarral que se llamaba Drugstore, a pocos metros de la Glorieta de Bilbao.

Allí se ufanaba de haber sido ejecutor del asesinato de Ortega Peña. A quien lo quisiera escuchar, decía sin temor que él lo había matado.

Cuando comenzó a llegar el exilio provocado por la dictadura militar de 1976, Almirón desapareció de los lugares públicos.

Hasta que fue descubierto y denunciado en 1981, como jefe de la custodia del ex ministro de Franco Manuel Fraga Iribarne.

Cambio 16, la revista progresista española de ese momento, y Diario 16 de la misma editorial, le dedicaron grandes titulares y varias tapas, por lo que Almirón tuvo que sumergirse nuevamente.

Sin embargo, en ese momento no estaban dadas las posibilidades que hoy tenemos.

En esta Argentina se puede tener confianza en un pedido de extradición, en una declaración de lesa humanidad de los crímenes cometidos por la Triple A y creo que también podemos confiar en que estamos cerca de que se haga justicia en un tema tan difícil y olvidado para muchos, como son los asesinatos cometidos durante el gobierno peronista del '74 y '75.

Este relato de los hechos es para refrescar la memoria de uno de los protagonistas del asesinato del diputado nacional, abogado, periodista y defensor de presos políticos, Rodolfo Ortega Peña.

Es para recordarle a Rodolfo Eduardo Almirón su participación, que ahora desconoce, no recuerda, en el primer asesinato asumido por la Triple A en la Argentina el 31 de julio de 1974.

Marcelo Duhalde mjduhalde@hotmail.com

Página|12, 02/01/07

jueves, 26 de julio de 2012

Palabra justa.


Los pueblos crean palabras para decir aquellas cosas que le son indispensables, aquellas cosas que estaban representadas por las palabras incorrectas, aquellas cosas que se pronunciaban en la lengua del antipueblo.
Los pueblos crean palabras, así como crean a sus lideres, así como crean sus destinos. Hace ya muchos años este pueblo sopló al oído de la historia una nueva palabra, una que a la vez dijera: justicia, igualdad, amor.
Una palabra nueva que fuera bálsamo para los humildes pero que a la vez sembrara el pavor en las negras almas de oligarcas y abusadores; una palabra que recogiera todo lo que un pueblo que esperó siente cuando la justicia por fin llega; una palabra: Evita…
Hay todo un mundo por liberar de la injusticia, y nuestra única arma es una palabra, la correcta, nuestra bandera.

Siempre es 26




Yo tenía doce años cuando el asalto al Moncada, dieciséis cuando el desembarco del Granma, dieciocho cuando los guerrilleros entraron, victoriosos, en La Habana. Los hombres de mi generación hemos tenido la suerte de coincidir, en el tiempo, con la Revolución Cubana. Desde temprano se nos mezcló en la vida y se nos metió en el alma.Junto a muchos millones de hombres, celebro esta revolución como si fuera mía.
Ella me ha transmitido fuerzas cuando me he sentido caer. Me ha contagiado energía, día tras día, año tras año, a lo largo del proceso que la puso a salvo de la derrota o la traición. Cuba rompió en pedazos la estructura de la injusticia y confirmó que la explotación de unas clases sociales por otras y de unos países por otros no es el resultado de una tendencia “natural” de la condición humana ni está implícita en la armonía del universo. Muchas murallas se ha llevado por delante este viento de buena furia popular.
La colonia se hizo patria y los trabajadores, dueños de su destino. La mujer dejó de ser una pasiva ciudadana de segunda clase. Se acabó el desarrollo desigual que en toda América Latina castiga al campo a la par que hincha a unas pocas ciudades babilónicas y parasitarias. Se borró la frontera que separa el trabajo intelectual del trabajo manual, resultado de las tradicionales mutilaciones que nos reducen a una sola dimensión y nos fracturan la conciencia.
No ha resultado ningún paseo esta hazaña, ni ha sido lineal el camino. Cuando son verdaderas, las revoluciones se hacen en las condiciones posibles. En un mundo que no admite arcas de Noé, Cuba ha creado una sociedad solidaria a un paso del centro del sistema enemigo. En todo este tiempo, yo he amado mucho a esta revolución. Y no solo en sus aciertos, lo que resultaría fácil, sino también en sus tropezones y en sus contradicciones.
También en sus errores me reconozco: este proceso ha sido realizado por sencillas gentes de carne y hueso, y no por héroes de bronce ni máquinas infalibles.La Revolución Cubana me ha proporcionado una incesante fuente de esperanza. Ahí están, más poderosas que toda duda o reparo, esas nuevas generaciones educadas para la participación y no para el egoísmo, para la creación y no para el consumo, para la solidaridad y no para la competencia. Y ahí está, más fuerte que cualquier desaliento, la prueba viva de que la lucha por la dignidad del hombre no es una pasión inútil, y la demostración, palpable y cotidiana, de que el mundo nuevo puede ser construido en la realidad y no solo en la imaginación de los profetas.

Eduardo Galeano

Estrella de Amor





RAGGI, Angela (1953) Pueblo Feliz. Libro de lectura para segundo grado, Buenos Aires, Editorial Luis Lasserre, p. 100.

martes, 24 de julio de 2012

Ricardo Forster y Carolina Scotto.- Charla-debate en Santa Rosa de Calamuchita


Ricardo Forster y Carolina Scotto.- Charla-debate en Santa Rosa de Calamuchita

¡¡Sí, juntos en Santa Rosa de Calamuchita!!

Para participar, escuchar, preguntar, aprender bajo el lema:
La democracia no es un pacto de silencio. Lula Da Silva


Carolina Scotto. Rectora de la Universidad Nacional de Córdoba. Profesora de Historia, Doctora en Filosofía argentina. Investigadora y docente de Filosofía Contemporánea y de Filosofía del Lenguaje II en la Escuela de Filosofía de Córdoba.


Ricardo Forster. Doctor en filosofía, ensayista, analista, investigador, profesor y destacado escritor. Uno de los creadores de "Carta Abierta". Condujo el programa de televisión Grandes Pensadores del Siglo XX, emitido por Canal Encuentro. Colaborador semanal en Revista Veintitres y en el diario Infonews.

Miércoles 25 de Julio, 18,30 hs. en “Arenas del Sheik”
¿Te los vas a perder?
ENTRADA LIBRE Y GRATUITA

ORGANIZA: Conciencia Popular Calamuchita.
INVITAN:
Agrupacion La Peñaloza, KOLINA Córdoba, La Bisagra, Centro de Estudios y Formación Política "Miguel Ángel Mozé", Colegio de Psicólogos de la Pcia. de Córdoba, Frente de Organizaciones Peronistas Córdoba, Corriente Peronista por el Proyecto Nacional, Corriente Peronista Descamisados Córdoba,Centro de Referencia del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación en Córdoba, Banco Popular de la Buena Fe de Villa Amancay, Amboy y San Ignacio, Asociación Civil "Gustavo Riemann", Espacio de la Memoria de Berrotarán, "CAUSA POPULAR", Mesa de Gestión Departamental de Calamuchita, del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, Banco Popular de la Buena Fe de Villa Rumipal y Villa del Dique, FRENTE GRANDE CÓRDOBA, La Jauretche Río Cuarto, La Cámpora Santa Rosa, Corriente Cutural Latinoamericana Rodolfo Walsh (La Walsh) de Villa María. Corriente Martín Fierro Córdoba. Los Dorrego - Colectivo Político Cultural;Partido de la Victoria, Unión Vecinal para la Victoria de Villa General Belgrano, Organización Territorial “La Jauretche” de Rio Cuarto;La Cámpora Embalse “Agrupacion por LA MEMORIA" de Almafuerte, La Secretaría de Educación de Almafuerte,
Bco. CREDICOOP filial Almafuerte, Municipalidad de Villa del Dique, Municipalidad y el Concejo Deliberante de la ciudad de Almafuerte, Municipalidad de Corralito, Frente Federal de Acción Solidaria (Embalse) y Conciencia Popular Calamuchita.

Voceros:
Cristóbal Pécora: 0351- 155197982
Gustavo Tamargo: 03546-15438400

lunes, 23 de julio de 2012

Día del Payador





En Argentina y Uruguay se celebra el 23 de julio el Día del Payador por haberse realizado en esa fecha del año 1884, en Montevideo, la famosa payada entre Juan Nava (Uruguay) y Gabino Ezeiza (Argentina). Ese día Gabino Ezeiza improvisó allí la que sería la célebre canción "Heroico Paysandú".



 

viernes, 20 de julio de 2012

La resaca.



La resaca.
(Por Fernando Brucoli)

Uyy, por dios, que mareo –me dije tratando de pensar en voz baja- ¿donde corcho estoy?

Una habitación casi a obscuras y en un silencio sepulcral, un dolor de bocho (inequívoca herencia de algún tinto de mala calidad) mareo, la boca pastosa.

Al rato de mirar alrededor y todavía sin reconocer el lugar en el que estaba me fije en una especie de diván que, aun dándome la espalda, se presentaba tentador para continuar durmiendo la mona; trabajosamente me incorpore y fui hacia el con pasos cortos y exagerando lentitud; al mirar el diván de cerca reconocí una figura humana, un hombre flaco con la barba de un par de días, desaseado pero muy bien empilchado, buena pilcha, pero como de una película de Sherlock Holmes.

Abrió los ojos de golpe, pero sin asustarse y después de enderezar la espalda como ocultando pudorosamente el gesto de desperezarse levanto apenas la cortina de la ventana, se me quedo mirando unos segundos con unos ojos que, escondidos en sus parpados como ponchos, daban una sensación de resignación infinita, terrible.

-Buenas tarde, señor- dijo como reteniendo un suspiro.
-Hola, como andás- respondí tendiéndole la diestra –Fernando…
-Alejandro- recitó apretándome amigablemente la mano y ahora con un gesto divertido 
-¿nos conocemos?
-Hmmm, yo no me acuerdo ¿donde estamos?- ahora el que esbozo una sonrisa fui yo

-A ver, déjeme que haga memoria- el trato de “usted” me puso apenas en guardia, pero el hombre continuó –me dejo acá el auto de la embajada yanky después de pasar por millares de retenes y puestos de control de un enjambre de tipos que ninguno tenia la mas pálida idea de que tenían que retener ni que había que controlar, es mas hoy mismo debo ser el tipo mas buscado del país, pero cruce la ciudad con las ventanilla abiertas y saludando a cientos que me reconocían y agitaban saludos a nuestro paso. Ahora estoy aquí, conversando con usted, supongo que no salimos de la ciudad, cosa que por otro lado seria bastante prudente.

-Uf, je, cada vez entiendo menos ¿estaremos muy lejos de Flores? Porque la verdad, no me queda una moneda y tengo una resacota que me esta matando…

-Me parece que anda un poco perdido amigo, ustedes los rojos ¡como le dan al escabio¡- repuso mientras se reía ajeno ya a los pudores y acartonamientos que estaban empezando a incomodarme- cuénteme, quien es usted, así podemos conversar como corresponde, nos presentamos y listo- dijo jocosamente, para continuar después en un hilo de voz- por lo visto a mi no me conocés…

-No disculpá, pero no- pensé que tal vez se tratara de alguna cantor o uno de esos famosos, como no tengo tele, nunca reconozco, y continué como simulando cierta pompa que estime muy graciosa- me llamo Fernando, soy empleado y estudiante crónico, me gusta Pappo, nací en Paternal y me crié en el hermoso Parque Chas, acabo de pasar la edad del Dante no me gusta el fobal, soy progre pero borrachin, bah, demasiado borrachin pa progre, pero demasiado progre para ser el rufián melancólico, ehjm, así, mas o menos…

-Ja ja, ahora el que no entiende nada soy yo, venga amigo, usted me cae bien, venga que le cuento, sabe que en los sótanos del palacio de invierno había una bodega enorme, una bacanada que emberretinaba al zar y en dos minutos usted se va a dar cuenta que algo de razón tenia el hombre…
Dijo esto y de abajo del diván saco una botella de vino, la estudio detalladamente mientras murmuraba:

-Me hubiera gustado probar el Château d’Yquem 1847 pero tuve que manotear cualquiera al azar, je, pero este va a andar bien –dijo mientras intentaba afanosamente abrir el elixir que abrazaban sus dedos- así que argentino, estos días esperaba al embajador que me iba a enviar su presidente, Yrigoyen, ahora me parece que no voy a poder conocerlo, ja ja, lindo país, me han dicho, alguna vez lo iré a conocer…

El corcho cedió a los ímpetus de mi anfitrión y se interrumpió para darle un profundo beso al deteriorado pico, siguió hablando mientras me extendía la botella de la que me prendería como a una mamadera.

-Opojmelitsa, decimos de este lado del mundo, la única forma civilizada de combatir la resaca, beba camarada, beba hasta que se le pase, hasta que deje de llover sopa…

La imagen de toneladas de Vitina cayendo sobre los techo me resulto tan graciosa que mi reprimida carcajada me hizo salir un chorro de vino por la nariz. El ruso me contemplaba con gesto divertidísimo, como empecinado en que el universo se redujera a esa sola habitación.

El buen sorbo que me iba de a poco calentando la sangre me ayudó también a tratar de devolverme a cierta presencia, obviamente estaba tremendamente drogado y viviendo una extrañísima pero vívida alucinación en la que me estaba tomando un vino con un ruso de vaya a saber que época, que a la sazón me hablaba en excelente porteño aunque decía no haber pisado nunca Buenos Aires, y que, por si esto se quedara corto, estaba esperando un embajador de ¡Yrigoyen! 
Ok, claro, ahora era todo mas claro, como el agua del Riachuelo.

-Y diga compañero, ¿como es eso de que llueve sopa? porque de los fenómenos climáticos rusos se bastante poco, ¿pero eso de que llueve sopa? Ojala que lloviera de este vino, mamita ¡esta zarpado en bueno!

-¿Por qué llueve sopa? Ah… esa es buena, hace algún tiempo tuve un conversación con Lvov, hablando del temita este de los bolcheviques, el tipo se cagaba de risa, decía que eran unos tipos que andaban por la vida con una cuchara en el bolsillo del saco esperando que llueva sopa, que no había que preocuparse por ellos a menos que, efectivamente, lloviera sopa, ja ja ja; quien iba a pensar que Rusia iba a morir ahogada en una tormenta de caldo y fideitos, ja ja ja
Hablaba y su cara se iba poniendo cada vez mas rara, como si las carcajadas que sobreactuaba su boca fueran negadas una a una por un velo sombrío que desde sus ojos cubriera todo con una pringosa patina de tristeza. 
Cuando pudo para de reírse, justo cuando pensé que comenzaría a llorar a lagrima viva, me arrebató la botella de las manos y se la entubo entre los labios empinada casi perpendicular al piso. Se quedó callado, largamente callado, por lo visto en algún momento el peso de mis parpados le gano al efecto de opojmelitsa y me quede dormido.
Me despertó sobresaltado el batifondo de la puerta del baño de mi casa de flores, que se abría empujando mis pies que, como muertos, trababan su recorrido; el ruido, la luz terrible de las lamparitas bajo consumo, la voz chillona de mi mujer increpándome por haberme quedado dormido en el inodoro, con el codo empuje la puerta y una vez vuelta a cerrar me subí los pantalones, camine los exiguos pasos hasta la cocina; no sin hacer un poco de enchastre llene el pingüino de cerámica con un buen litro de tinto de la damajuana, la deje ahí nomás y me encamine de nuevo al baño, mi jermu me miraba seria:

-¿A donde mierda vas con eso?
-Me voy a tomar un vino con el Flaco Kerenski…

Fernando Luis.

Este 26 todos en Córdoba


jueves, 19 de julio de 2012

Los hijos de Perón


Los hijos de Perón

Por Envar El Kadri*

Fuimos hijos suyos, es cierto. En todos los sentidos: hijos de su ejemplo y voluntad puesta al servicio del pueblo; hijos en el amor y respeto que se siente por un padre querido; hijos que por la magia de una palabra: “compañeros”, se transformaron en “hermanos”.

Así lo sentimos a Perón, como a un padre.. Padre Eterno le gustaba llamarse, y tenía razón: sus hijos nos peleábamos como suele suceder entre los hermanos, pero guay que de afuera nos torearan: ahí formábamos uno en su defensa.

Pertenezco a la generación de los únicos privilegiados, la de quienes leíamos Mundo Infantil antes que Billiken, para descubrir después, gracias a quienes aprendieron con los Vigil, que eso era “adoctrinamiento”, y lo de ellos ¿qué?. Con la diferencia que así nos formábamos con una mentalidad nacional, “flor de ceibo”, mientras que la de ellos era un adoctrinamiento hacia doctrinas de “progreso y liberalismo” que le abrían las puertas al imperialismo.

Cuando en el ’55 dejamos atrás la niñez privilegiada, esas lecturas fueron responsables de que nuestra adolescencia tuviera olor a clorato de potasio y azufre, mientras que la de los adoctrinados por Billiken podía disfrutar de chicles-goma “Bazooka” ó los beneficios del nylon importado de USA...

Crecimos de golpe en medio de bombazos y persecuciones: los padres de nuestros compañeros eran las víctimas de la “libertad recuperada”: Vergara Russo, moría el 16 de junio en Plaza de Mayo; Cogorno fusilado un año después.

Ahí nos hirvió la sangre rebelde que Evita nos inculcara: empezamos la lucha por el retorno de nuestro Padrecito con lo que teníamos y podíamos. ¿Acaso no se habían usado piedras y aceite hirviendo para contener las invasiones inglesas?¿Por qué no podríamos hacerle la pata ancha a estos nuevos invasores disfrazados de “libertadores”?


Fragmento de Cazadores de utopías

Espontaneísmo, voluntarismo, desconocimiento de las condiciones objetivas y subjetivas; amén de las climáticas y estratosféricas; de todo pueden ser acusados estos tozudos hijos de Perón que se jugaron por su retorno, que dieron su vida por él y soñaron con una patria liberada. De todo, menos hijos de puta.

Qué fácil resulta tener razón a posteriori, pero que lindo fue equivocarse defendiendo “lo que Perón nos legó: una Argentina “libre, justa y soberana”, como decía una canción de la época.

Qué lindo fue tener un padre como Perón, con perdón de los psicólogos, los sabios y los que se las saben todas.

Y qué lindo fue tener hermanos como aquel Tito Bevilacqua con el que vendíamos “Palabra Argentina” y luego nos metíamos en los cines para silbar al almirante Tessaire cuando desde la pantalla denigraba a Perón y el peronismo; ó aquel otro, Felipe Vallese, “Misterix” por su impermeable blanco abotonado en doble hilera, parecido al del personaje de historieta, con el que nos escapábamos juntos después de haber recuperado “armas para el pueblo” y, sentados en el fondo del 406, decirnos mutuamente una gran mentira: “esto no es para mí, yo no me meto más en nada”;

O aquel gigante Gustavo Rearte que nos conducía con una sonrisa y se tiroteaba con la policía defendiendo su libertad; ó con Jorge Rulli refugiándose en Montevideo, sobreviviendo junto con otros compañeros, gracias a las noches de póker con que el “Gordo Cooke” hacia una diferencia para ayudar a los “muchachos”,

O el bueno de Dardo Cabo, distribuyendo gelinita a los compañeros de la Resistencia, siguiendo las huellas de su padre, preso en Caseros, porque como decía el General: “hijo de tigre, overo ha de ser”. Y después yéndose a Malvinas en un avión que no era suyo, para recuperar lo que era nuestro; ó el Petitero, el Anguila, el del Poncho Colorado, que nunca supe como se llamaba, que venía de la U.B. Facundo Quiroga, de allá por Urquiza, toda aquella barra de Corrientes y Esmeralda, “que juró lealtad al conductor /luchará si fuera hasta la muerte/ por la Patria y también por Juan Perón.


Taco Ralo, 1968, guerrilleros capturados por Gendarmería.

Qué lindo fue entreverarse en todos esos entreveros con tantos hermanos que sí los puedo y debo nombrar por ser ó haber sido hijos de Perón: el Vasquito Unamuno, que se nos fue apagando por esas putas enfermedades que te matan lo que el plomo de una 45 respetó; aquellos que como José Luis Nell venían del nacionalismo fierrero y se fueron entregando en cuerpo y alma en este peronismo montaraz que trataba de pegar fuerte y duro para destruir “la oligarquía y los imperialismos en simulada pugna”, porque sobraba tanto coraje y amor por el Viejo que no a uno, a una tribu entera de imperialismos nos atrevíamos los hijos de Perón.

...Y cuando nos tocaba perder, perdíamos. Calladitos, nomás. Avergonzaditos, nomás. PERO DE PIE. Con la “mirada desafiante” como decían las crónicas policiales.

Los hijos de Perón fuimos duros y tiernos, serios y jodones, dialoguistas y “apretadores”, enamoradizos y olvidadizos, cantores y gritones, apresurados y retardatarios, pobres y pobrísimos.

Nosotros, pobres de solemnidad, pobres vinimos al Movimiento, pobres lo servimos aún cuando millones pasaron por nuestras manos, y pobres seguiremos hasta el día en que nos vayamos a jugar con el Viejo arriba en alguna nube.

Pobre ejemplo le dejamos a quienes, por ser los “nietos de Perón”, tendrían que saber que la política no es un medio para enriquecerse ni servirse, para trepar y trepar.

...Los hijos de Perón seguimos creyendo que es realista pedir lo imposible; ó que podemos alcanzar las estrellas aunque estén muy altas; ó que “se puede y se debe” vivir como hermanos...

[Extraído de “Envar El Kadri. Historias del Peronismo Revolucionario”]



* Envar "Cacho" El Kadri nació en Río Cuarto un 1º de mayo de 1941 y fallecio un 19 de julio de 1998 en Tilcara, Provincia de Jujuy.

Vamo que vamo


Los hijos de Sandino ni se venden ni se rinden

 
Eduardo Galeano cuenta la historia de la Revolución Sandinista

1963
Río Coco

En los hombros lleva el abrazo de Sandino,

Que el tiempo no ha borrado. Treinta años después, el coronel Santos López vuelve a la guerra, en la selva del norte, para que Nicaragua sea.
Hace un par de años nació el Frente Sandinista. Lo nacieron, junto a Santos López, Carlos Fonseca Amador y Tomás Borge y otros muchachos que no conocieron a Sandino pero quieren continuarlo. La tarea costará sangre, y ellos lo saben:
- Tanta inmundicia no puede ser lavada con agua, por muy bendita que esté -dice Carlos Fonseca.
Perdidos, sin armas, ensopados por la lluvia eterna, sin comer pero comidos, jodidos, rejodidos, deambulan por la selva los guerrilleros. No hay peor momento que la caída del sol. El día es día y la noche, noche, pero el atardecer es hora de agonía y espantosa soledad; y los sandinistas no son nada todavía, o casi nada.

1976
Selva de Zinica

Carlos

Criticaba de frente, elogiaba por la espalda. Miraba como gallo enojado, por miope y por fanático, bruscos ojos azules del que veía más allá de los otros, hombre de todo o nada; pero las alegrías lo hacían brincar como a niño chico y cuando dictaba órdenes parecía que estaba pidiendo favores.
Carlos Fonseca Amador, jefe de la revolución de Nicaragua, ha caído peleando en la selva.
Un corones trae la noticia e la celda donde Tomás Borge yace reventado por la tortura.
Juntos habían andado mucho camino, Carlos y Tomás, desde los tiempos en que Carlos vendía diarios y caramelos en Matagalpa; y juntos habían fundado, en Tegucigalpa, el Frente Sandinista.
- Murió -dice el coronel.
- Se equivoca, coronel -dice Tomás

1977
Managua

Tomás

Atado a una argolla, tiritando, todo enchastrado de mierda y sangre y vómito, Tomás Borge es un montoncito de huesos rotos y de nervios desnudos, una piltrafa que yace en el suelo esperando el próximo turno de suplicio.
Pero ese resto de él todavía puede navegar por los secretos ríos que lo viajan más allá del dolor y la locura. Dejándose ir llega a otra Nicaragua; y la ve.
A través de la capucha que le estruja la cara hinchada por los golpes, la ve: cuenta las camas de cada hospital, las ventanas de cada escuela, los árboles de cada parque, y ve a los dormidos parpadeando, encandilados, los muertos de hambre y los muertos de todo que están siendo despertados por los soles recién nacidos de su vuelo.

1977
Archipiélago de Solentiname

Cardenal

Las garzas, que están mirándose al espejo, alzan los picos: ya vuelven las barcas de los pescadores, y tras ellas las tortugas que vienen a parir a la playa.
En un barracón de madera, Jesús come sentado a la mesa de los pescadores. Come huevos de tortuga y carne de guapotes recién pescados, y come yuca. La selva, buscándolo, mete sus brazos por las ventanas.
A la gloria de este Jesús escribe Ernesto Cardenal, el monje poeta de Solentiname. A su gloria canta el zanate clarinero, pájaro sin adornos, siempre volando entre pobres, que en las aguas del lago se refresca las alas. Y a su gloria pintan los pescadores. Pintan cuadros fulgurantes que anuncian el Paraíso, todos hermanos, nadie patrón, nadie peón; hasta que una noche los pescadores que pintan el Paraíso deciden empezar a hacerlo y atraviesan el lago y se lanzan al asalto del cuartel de San Carlos.
- ¡Jo-dío! ¡Jo-dío!
A muchos mata la dictadura mientras los buscadores del Paraíso caminan por las montañas y los valles y las islas de Nicaragua. La masa se levanta, el gran pan se eleva...

1978
Managua

"La Chanchera"

llama el pueblo nicaragüense al Palacio Nacional. En el primer piso de este pretencioso partenón discursean los senadores. En el segundo, los diputados.
Un mediodía de agosto, un puñado de guerrilleros al mando de Edén Pastora y Dora María Téllez asalta la Chanchera, t en tres minutos se apodera de todos los legisladores de Somoza. Para recuperarlos, Somoza no tiene más remedio que liberar a los sandinistas presos. El pueblo ovaciona a los sandinistas todo a lo largo del camino al aeropuerto.
Éste va siendo un año de guerra continua. Somoza lo inauguró mandando matar al periodista Pedro Joaquín Chamorro. Entonces el pueblo en furia incendió varias empresas del dictador. Las llamas arrasaron a la próspera Plasmaféresis, S. A., que exportaba sangre nicaragüense a los Estados Unidos; y el pueblo juró que no descansará hasta enterrar al vampiro, en algún lugar más oscuro que la noche, con un a estaca clavada en el corazón.

1979
Siuna

Retrato de un obrero en Nicaragua

José Villarreina, casado, tres hijos. Minero de la empresa norteamericana Rosario Mines, que hace setenta años volteó al presidente Zalaya. Desde 1952, Villarreina escarba oro en los socavoces de Siuna; pero sus pulmones no están todavía del todo podridos.
A la una y media de la tarde del 3 de julio de 1979, Villarreina asoma por una de las chimeneas del socavón y un vagón de mineral le arranca la cabeza. Treinta y cinco minutos después, la empresa comunica al muerto que de conformidad con lo dispuesto por los artículos 18, 115, y 119 del Código de Trabajo, queda suspendido por incumplimiento de contrato.

1979
En toda Nicaragua

Corcovea la tierra

mas que en todos los terremotos juntos. Los Aviones sobrevuelan la selva inmensa arrojando napalm y bombardean las ciudades erizadas de barricadas y trincheras. Los sandinistas se apoderan de León, Masaya, Jinotega, Chinandega, Estelí, Carazo, Jinotepe...
Mientras Somoza espera un préstamo de 65 millones de dólares, que cuenta con el visto bueno del Fondo Monetario Internacional, en toda Nicaragua se pelea árbol por árbol y casa por casa. Enmascarados tras las caretas o pañuelos, los muchachos atacan con fusiles o machetes o palos o piedras o lo que venga; y si el fusil no es de verdad el de juguete sirve para impresionar.
En Masaya, que en lengua india significa Ciudad que arde, el pueblo, sabio en pirotecnia, convierte los tubos de agua en cañones de morteros y también inventa la bomba de contacto, sin mecha, que estalla al golpear. En medio del tiroteo caminan las viejecitas cargando grandes bolsas llenas de bombas, y las van distribuyendo como quien reparte pan.

1979
En toda Nicaragua

Que nadie quede solo,

que nadie se pierda, que se armó la runga, reventó la mierda, el gran corre-corre, el pueblo arrecho peleando a puro pecho contra tanques y tanquetas, camiones y avionetas, rifles y metralletas, todos el mundo a la bulla, de aquí nadie se raja, sagrada guerra mía y tuya y no guerrita de rifa y rafa, pueblo fiero, arsenal casero, a verga limpia peleando, si no te morís matando vas a morirte muriendo, que codo a codo es el modo, todos con todo, pueblo siendo.

1979
Managua

"Hay que estimular el turismo",

ordena el dictador mientras arden los barrios orientales de Managua, incendiados por los aviones.
Desde el búnker, gran útero de acero y cemento, gobierna Somoza. Allí no se escucha el trueno de las bombas, ni los aullidos de la gente, ni nada se ve ni se huele. En el búnker vive Somoza desde hace tiempo, en pleno centro de Managua pero infinitamente lejos de Nicaragua; y en el búnker se reúne, ahora con Fausto Amador.
Fausto Amador, padre de Carlos Fonseca Amador, es el administrador general del hombre más rico de Centroamérica. El hijo, fundador del Frente Sandinista, entendía de patria; el padre, de patrimonio.
Rodeados de espejos y de flores de plástico, sentados ante una computadora, Somoza y Fausto Amador organizan la liquidación de los negocios y el desvalije total de Nicaragua.
Después , Somoza declara por teléfono:
- Ni me voy ni me van.

1979
Managua

El nieto de Somoza

Lo van y se va. Al alba, Somoza sube al avión hacia Miami. En estos últimos días los Estados Unidos lo han abandonado, pero él no ha abandonado a los Estados Unidos:
- En mi corazón, yo siempre seré parte de esa gran nación.
Somoza se lleva de Nicaragua los lingotes de oro del Banco Central, ocho papagayos de colores y los ataúdes de su padre y de su hermano. También se lleva, vivo, al príncipe heredero.
Anastasio Somoza Portocarrero, nieto del fundador de la dinastía, es un corpulento militar que ha aprendido las artes del mando y el buen gobierno en los Estados Unidos. En Nicaragua fundó y dirigió, hasta hoy, la Escuela de Entrenamiento Básico de Infantería, un juvenil cuerpo del ejército especializado en el interrogatorio de prisioneros y famoso por sus habilidades: armados de pinza y cuchara, estos muchachos saben arrancar uñas sin quebrar las raíces y saben arrancar ojos sin lastimar los párpados.
La estirpe de los Somoza marcha al destierro mientras Augusto César Sandino pasea por toda Nicaragua, bajo lluvia de flores, medio siglo después de su fusilamiento. Se ha vuelto loco este país: el plomo flota, el corcho se hunde, los muertos se escapan del cementerio y las mujeres de la cocina.

1979
Granada

Las comandantes

A la espalda, un abismo. Por delante y a los costados, el pueblo armado acometiendo. El cuartel La Pólvora, en la ciudad de Granada, último reducto de la dictadura, está al caer.
Cuando el coronel se entera de la fuga de Somoza, manda callar las ametralladoras. Los sandinistas también dejan de disparar.
Al rato se abre el portón de hierro del cuartel y aparece el coronel agitando un trapo blanco.
- ¡No disparen!
El coronel atraviesa la calle.
- Quiero hablar con el comandante.
Cae el pañuelo que cubre la cara:
- La comandante soy yo -dice Mónica Baltodano, una de las mujeres sandinistas con mando de tropa.
- ¿Que qué?
Por boca del coronel, macho altivo, habla la institución militar, vencida pera digna, hombría del pantalón, honor del uniforme:
- ¡Yo no me rindo ante una mujer! -ruge el coronel.
Y se rinde.

1979
En toda Nicaragua

Naciendo

Tiene unas horas de edad la Nicaragua recién nacida en los escombros, verdor nuevito entre las ruinas del saqueo y de la guerra; y la cantora luz del primer día de la Creación alegra el aire que huele a quemado.

1980
En toda Nicaragua

Andando

La revolución sandinista no fusila a nadie; pero del ejército de Somoza no queda ni la banda de música. A manos de todos pasan los fusiles, mientras se desencadena la reforma agraria en los campos desolados.
Un inmenso ejército de voluntarios, armados de lápices y de vacunas, invade su propio país. Revolución, revelación, de quienes creen y crean: no infalibles dioses de majestuoso andar sino personitas nomás, durante siglos obligadas a la obediencia y entrenadas para la impotencia. Ahora, a los tropezones, se echan a caminar. Van en busca del pan y la palabra: esta tierra, que abrió la boca, está ansiosa de comer y de decir.

1980
En toda Nicaragua

Descubriendo

Cabalgando, remando, caminando, los brigadistas de la alfabetización penetran las más escondidas comarcas de Nicaragua. A la luz del candil, enseñan a manejar el lápiz a quien no sabe, para que nunca más lo engañen los que se pasan de vivos.
Mientras enseñan, los brigadistas comparten la poca comida, se agachan en el acarreo y la deshierba, se pelan las manos hachando leña y pasan la noche tendidos en el suelo, aplaudiendo mosquitos. Descubren miel silvestre dentro de los árboles y dentro de las gentes leyendas y coplas y perdidas sabidurías; poquito a poco van conociendo los secretos lenguajes de las hierbas que alegran sabores y curan dolencias y mordeduras de serpientes. Enseñando, los brigadistas aprenden toda la maldición y la maravilla de este país, su país, habitado por sobrevivientes: en Nicaragua, quien no se muere de hambre o peste o tiro, se muere de risa.

1983
Río Tuma

Realizando

Entre la dignidad y el desprecio andan zumbando las balas en Nicaragua; y a muchos la guerra les apaga la vida.
Éste es uno de los batallones que están peleando contra los invasores. Desde los barrios más pobres de Managua han venido estos voluntarios hasta los lejanos llanos del río Tuma. Cada vez que cesa el estrépito, el Beto, el profe, contagia letras. El contagio ocurre cuando algún miliciano le pide que le escriba una carta. El Beto cumple y después:
- Ésta es la última que te escribo. Te ofrezco algo mejor.
Sebastián Fuertes, soldador de hierro del barrio El Maldito, hombre de unos cuantos años y guerras y mujeres, es unos de los que se arrimó y fue condenado a la alfabetización. Lleva unos pocos días rompiendo grafos y desgarrando papeles en los respiros del tiroteo, y aguantándose a pie firme mucha broma pesada, cuando llega el primero de mayo y sus compañeros lo eligen para el discurso.
En un potrero lleno de bosta y garrapatas, se celebra el acto. Sebastián se alza sobre un cajón, saca del bolsillo un papelito doblado y lee las primeras palabras nacidas de su mano. Lee de lejos, estirando el brazo, porque la vista no lo ayuda y lentes no tiene:
- ¡Hermanos del batallón 8221!...

1983
Managua

Desafiando

Penachos de humo brotan de las bocas de los volcanes y de las bocas de los fusiles. Los campesinos van a la guerra en burro, con un papagayo al hombro. Dios era pintor primitivo cuando imaginó esta tierra de hablar suavecito.
Los Estados Unidos, que entrenan y pagan a los contras, la condenan a morir y a matar. Desde Honduras la atacan los somocistas; desde Costa rica, Edén Pastora la traiciona.
Y en eso viene el Papa de Roma. El Papa maldice a los sacerdotes que aman a Nicaragua más que al alto cuelo, y manda a callar, de mala manera, a quienes le piden que rece por las almas de los patriotas asesinados. Tras pelearse con la católica multitud reunida en la plaza, se marcha, furioso, de esta tierra endemoniada.

1984
Washington

"1984"

El Departamento de Estado de los Estados Unidos decide suprimir la palabra asesinato en sus informes sobre violación de derechos humanos en América Latina y en otras regiones. En lugar de asesinato, ha de decirse: ilegal o arbitraria privación de vida.
Hace tiempo que la CIA evita la palabra asesinar en sus manuales de terrorismo práctico. Cuando la CIA mata o manda matar a un enemigo, no lo asesina: lo neutraliza.
El Departamento de Estado llama fuerzas de paz a las fuerzas de guerra que los Estados Unidos suelen desembarcar al sur de sus fronteras; y llama luchadores de la libertad a quienes luchan por la restauración de sus negocios en Nicaragua.

Eduardo Galeano - Memoria del fuego 3

miércoles, 18 de julio de 2012

¨estar aquí es también estar un poco en la Argentina¨



La Presidenta Cristina Fernández inició su visita oficial a Bolivia

La mandataria arribó al Aeropuerto Internacional Jorge Wilstermann, acompañada por el canciller, Héctor Timerman; el ministro de Planificación, Julio De Vido y el vocero presidencial, Alfredo Scoccimarro, entre otras autoridades.

"Hoy es un día muy grato estar aquí. Quiero decirles a todos que estamos muy contentos, estar aquí es también estar un poco en la Argentina" afirmó la Jefa de Estado ante la bienvenida que le ofreció el gobierno de aquél país.

Cristina Fernández recibió la llave de la ciudad de Cochabamba, de manos del Alcalde Edwin Castellano. Como parte de la visita oficial que durará 24 horas, la Presidenta y su par latinoamericano, Evo Morales, concretarán reuniones para analizar una amplia agenda de temas sobre intereses comunes.

La primera mandataria, quien partió en el avión Tango 01 a las 15.45, será agasajada esta noche por el primer mandatario boliviano con una cena en el hotel Cochabamba, donde se alojará, y mañana al mediodía tendrán una reunión bilateral.

 
leído y copiado de este LINK

martes, 17 de julio de 2012

Presentación de "La compañera Evita" de Norberto Galasso



Este próximo jueves 19 de julio a las 19 hs. será la presentación del nuevo libro de Norberto Galasso, "La compañera Evita. Vida de Eva Duarte de Perón", en el ND Ateneo. Paraguay 918 - CABA.

Contando  con la presencia de Estela de Carlotto, Alfredo Ferraresi, Lito Borello y el autor.

domingo, 15 de julio de 2012

¿UNIDOS Y ORGANIZADOS?



¿UNIDOS Y ORGANIZADOS?
Escribo esto desde el enojo, el enojo que me produce como peronista – y consecuentemente kirchnerista -, la facilidad con que muchos compañeros parecen  sumarse graciosamente a quienes quieren derribar la construcción en curso.
Paso a explicarme.
Cuando un hecho determinado irrumpe en la vida política de un pueblo hay diversas maneras de analizarlo.
Una de ellas es desde lo ideológico. En este análisis valoramos la ideología de quien o quienes provocan este hecho particular y a priori hacemos el primer diagnóstico: está bien / está mal, favorece / desfavorece, adelanta / atrasa, etc. El riesgo de este análisis es que suele omitir el contexto en el cual se produce el hecho y además, y tal vez esto es lo más grave, al analizarlo le ponemos nuestra propia carga ideológica, lo cual contribuye a darle un perfil sesgado al análisis.
El análisis político lineal (que es consecuencia directa de un primer análisis ideológico), se basa en una simpleza básica, en la construcción de un mundo de buenos y malos (concepción maniquea), de tal forma que, si el “hecho” lo produjo un “malo”, entonces el hecho es malo, y viceversa. En este análisis, el malo es totalmente malo y el bueno totalmente bueno, de tal manera que no deja margen alguno para la sana y productiva disidencia y/o el análisis.
En lo personal creo,  al igual que muchos, que cuando se produce un hecho político lo que hay que analizar con la mayor objetividad es a quien perjudica y a quien favorece. Si perjudica al campo popular el hecho es lamentable, más allá de quienes lo promuevan y más allá de que estos sean nuestros compañeros de ruta.
En estos días desde los medios hegemónicos por un lado, y desde los medios oficiales por otro (¿), se ha venido fogoneando la ruptura de la CGT. Propios y ajenos, amigos y enemigos, parecieran festejar este “hecho”.      
La ruptura de la CGT y el alejamiento del compañero Moyano del Proyecto Nacional y Popular, es un hecho tremendamente negativo para el campo popular. Sólo quienes están en contra de que este modelo siga adelante pueden valorarlo como positivo, y por supuesto algunos imbéciles que persisten en seguir gritando como si los últimos cuarenta años de historia hubieran pasado al pedo.
Discutir la legitimidad de la representación que ejerce el compañero Moyano nos llevaría a discutir la “legitimidad” de muchos legisladores, gobernadores e intendentes que están donde están por metodologías similares – por no decir idénticas -, a las que se usan dentro del sindicalismo. Tampoco vale rescatar archivos de los años ´70, porque no sé cuantos gobernadores, intendentes y funcionarios kirchneristas saldrían indemnes de ello.
Saben qué? A veces me pasa que descubro en compañeros kirchneristas un sentido de clase pequeño burguesa que me asusta… hablan de lo nacional y popular pero se “espantan” de los negros como Moyano… y en nuestra patria, lo nacional y popular es morocho y peronista.
Unidos y Organizados, esa es la consigna, pero primero hay que unir y luego organizar… porque si desunimos no nos quedará nada para organizar.                                                                                    



Roberto Martinez. La Peñaloza Córdoba