domingo, 28 de junio de 2009

Verguenza...

No han sentido a veces verguenza de pertenecer...
Digo, por que yo, en este momento, a las 22.27 horas del día 28 de junio del año 2009, siento verguenza propia y ajena de ser argentino.
De pertenecer a un pueblo sin memoria, sin visión seria de futuro (que no pase por ver que me puedo comprar para ser "mas feliz"), un pueblo desagradecido de su propia suerte, un pueblo al que le da lo mismo que un narco, una paralitica o una demente, sean diputados de la nación.
Un pueblo al que le molesta que los que tenemos memoria, recordemos a nuestros martires que dieron todo de si para que hoy, pudieramos tener un presente mejor y un sueño verdadero de futuro.
Un pueblo que repite cacofónicamente que la politica es una mierda y en su aparente (aparente?) apatía, permite que la mierda entre por la puerta grande a la politica y entonces, rife y enajene el futuro de nuestros hijos y nuestros nietos.
Todo esto y mucho más, compone mi verguenza ajena.
La verguenza propia es por pertenecer a este pueblo.

Por que de última uno ha hecho todo lo que podía - y más - para que el futuro brille...
Entonces... sólo falta

que el último apague la luz...

jueves, 25 de junio de 2009

De grandezas y chiquezas

Ayer, en nuestra Villa, se debía efectuar el Acto de Cierre de campaña del Frente para la Victoria, en un local en el centro del pueblo.
Quienes trabajamos para este Proyecto en ningún momento habíamos planeado algo así.
Por qué?
Porque conocedores de la idiosincrasia de la gente de nuestra Villa (tropa propia y ajena), sabíamos de ante mano:
* Que la tropa propia no iría al acto si este era en el centro del pueblo y con la participación del intendente (que así lo había prometido);
* Que la gente “suelta” tampoco se expondría a ir al centro (por los apretes y los compromisos); y por último…
* Que no era fiable la promesa que el intendente asistiera y llevara su gente.

Y pasó lo que debía pasar.
La gente nuestra no fue, la gente “suelta” tampoco, y el intendente ni fue, ni llevó gente, e inclusive, operó para que nadie fuera.

El mismo intendente que viaja a Buenos Aires a pedir plata para el “pueblo”.
El mismo intendente que después dibuja los gastos y se queda con la mejor tajada de la plata que viene.
El mismo intendente que pide una licencia que abarca cinco días antes y cinco días después de la elección para no aparecer comprometido en nada que tenga que ver con el resultado del comicio.
El mismo intendente que se ubica en las antípodas del Proyecto Nacional.
El mismo intendente que, remedando al “Cleto”, se ha vareado por el radicalismo, el juecismo y el justicialismo, traicionando a todos en el momento oportuno.
El mismo intendente que le promete votos a Juez, a Acastello y a Mondito, “los tres servicios en la misma factura y al mismo precio” (leer “Los camaleones ponen huevos…” en este mismo blog).

Pero bueno, esa es historia nuestra. (tal vez nuestro Karma).

La lección es otra.

La lección pasa por entender que no se puede construir “poder político real” a partir de los intendentes. Que para construir poder es menester crear una herramienta idónea para ello. Que el PJ no es esa herramienta, porque deja afuera a un montón de gente (a algunos los espanta), y porque además esto es imposible donde el poder político - provincial o local -, es de sentido contrario (ejemplo: Córdoba donde el PJ esta con el modelo agrogarca).

Pero bueno, volviendo a nuestra Villa: Nos hacemos responsable exclusivos de los votos del Frente, así sean 10, 100, o más.

De lo demás, nos ocuparemos a partir del 29 (inclusive de los compromisos del gobierno nacional con el intendente…). La peor batalla es la que no se libra.

¡Hasta la Victoria carajo!

lunes, 22 de junio de 2009

Votar por una sociedad mas justa

Por Juan Manuel Abal Medina *
En muchos momentos de la historia, en diferentes países, sectores progresistas, de izquierda y nacional-populares debieron elegir si acompañar los procesos de cambio en curso o apostar por opciones minoritarias, puristas, más expresivas que capaces de influir sobre los acontecimientos. La intelectualidad de izquierda norteamericana, por ejemplo, contribuyó a construir la coalición social de apoyo al New Deal de Franklin Roosevelt, aun sin compartir la totalidad de sus ideas o de sus alianzas, que incluían a los demócratas moderados del sur y a las “maquinarias” urbanas tradicionales. Pero en otros casos, como en el Chile de Salvador Allende, las diferencias al interior de estos sectores se agigantaron y terminaron por abrir las puertas al golpe de la derecha.
Salvando las indudables distancias con estos casos, hoy vivimos en la Argentina un escenario con similitudes a las mencionadas. Sobre todo en la Capital Federal, un grupo de votantes que valora la inclusión social (y que, por ende, podemos considerar de izquierda o nacional-populares) parece dispuesto a optar por las candidaturas de Pino Solanas o de Aníbal Ibarra. Esta es una decisión respetable, sin dudas. Pero la pregunta que debemos hacernos es qué contribución pueden hacer Solanas o Ibarra a la construcción de una sociedad más justa e igualitaria, a partir de un monobloque legislativo, basado en un total personalismo individual. Carlos Heller, en cambio, integra un proyecto nacional que, desde el año 2003, viene trabajando por construir esa sociedad equitativa, soportando las enormes presiones de los sectores concentrados de la economía. La única manera de superar estas presiones, que pugnan por volver a un Estado mínimo, es mediante un proyecto político sólido y con amplios respaldos; no con individualidades dispersas, presentes en un solo distrito.
Puede que estos votantes no compartan todas las acciones o las alianzas del gobierno nacional. Sin embargo, en las disputas de fondo por la redistribución del ingreso y del poder social, ¿qué gobierno ha hecho más que éste por construir un país más incluyente? ¿Qué gobierno ha sido tan firme ante los organismos internacionales, ante las empresas privatizadas, ante los factores tradicionales de poder? Recordemos, además, que en la pelea más dura en tal sentido (al proponer retenciones móviles a la exportación de soja) los sectores que se presentan como “puristas” eligieron una prescindencia que fue funcional a las patronales agropecuarias, o incluso en algunos casos optaron directamente por apoyarlas. Fueron el gobierno, sus legisladores y los representantes de los trabajadores quienes pusieron el cuerpo a la pelea por cobrar más impuestos a los sectores de mayores ingresos, soportando los costos que ello implicó. Por eso, cuando pasamos de los discursos a las prácticas, la opción auténticamente progresista, la que puede incidir realmente a favor de la redistribución de la riqueza y el poder social, es la que encabezan Carlos Heller, en Capital, y obviamente la de Néstor Kirchner, en provincia.
* Vicejefe de Gabinete.

bien por el compañero Abal Medina, desde acá agregamos:
la opción autenticamente progresista, que puede incidir realmente a favor de la redistribución de la riqueza y el poder social, es la que encabezan en Córdoba Eduardo Accastello y Carmen Nebreda

(Robado del Pagina 12 de hoy, gracias muchachos)

Sea como se sea VAMOS GANANDO

En los últimos días circuló una encuesta de la Consultora Equis (la de Artemio López, peronista devenido en “Pino Solanista”), según la cual los resultados nacionales de las elecciones del próximo 28 serían así:
Frente para la Victoria 35 %
Acuerdo Cívico y Social 25 %
Unión PRO 15 %
Indecisos 25 %
No es intención de este análisis poner en duda los números, no obstante aclaramos que aparecen como muy lineales, muy simplistas, y que además el porcentaje de indecisos se ve muy abultado.
Pero bueno, es lo que hay.
Ahora bien, vamos al tema de los indecisos. Teóricamente (desde la estadística pura), estos indecisos votarán en iguales porcentajes que el resto (sólo que al momento de la encuesta no lo tienen definido), es decir, de estos indecisos, el 35% votará al FPV, el 25% a la CC, y el 15% al PRO. Y quedará un remanente de indecisos, a los cuales les deberemos aplicar el mismo criterio. Ello hasta que el porcentaje de indecisos no sea cuantificable (menor a un dígito).
En un primer cálculo y de acuerdo a este criterio, redodeando, aproximando e interpolando, los resultados serían los siguientes:
Frente para la Victoria 43 %
Acuerdo Cívico y Social 33 %
Unión PRO 23 %
Y los indecisos se reducirían al 1 %
O sea, que el voto de los indecisos siempre termina favoreciendo a quien esta primero, lo cual es lógico, y es lo que sucede.

Pero hay un tema anterior a este que sería bueno que las consultoras lo explicaran.
Es el tema de la gente que no va a ir a votar.
Sabemos que en general el nivel de asistencia a las elecciones no es muy alto y ronda el 75% en una elección para intendente y/o gobernador y/o presidente (ocasionalmente llega a pasar el 80% en alguna jurisdicción determinada).
En las elecciones legislativas el nivel de asistencia ronda el 60/65 %.
Con lo cual yo puedo suponer que el 25% de indecisos del resultado de Equis corresponde a gente que no va a ir a votar ese día. En ese caso, y como esos votos no se computan - porque no existen -, el resultado sería el siguiente:
Frente para la Victoria 46 %
Acuerdo Cívico y Social 33 %
Unión PRO 20 %
Sería importante saber – o sea que las encuestadoras lo aclaren -, que pasa con la gente que no va a ir a votar, ya que estos no lo dicen al momento de ser encuestados.
Pero que bueno no?
Sea como sea
GANAMOS CARAJO!!!!

sábado, 20 de junio de 2009

Por fin una consultora Nacional y Popular

Aguante la Consultora Z!!!

Después del conflicto del año pasado con la corporación agrogarca era de esperar el papel que jugó la prensa libre en esta campaña electoral.

Presenciamos sucesivas y simultáneas operaciones realizadas por los distintos medios con el objetivo de:

1. Instalar las candidaturas que entienden son las más perjudiciales al movimiento nacional, tal es el caso del intento de polarizar con el Narcolo en la Provincia de Buenos Aires como la campaña armada a favor del carriotista Pino en la Ciudad autónoma de Buenos Aires (caba).

2. Crear el ambiente adecuado para desacreditar el triunfo popular con campañas de fraude, clientelismo y otros gorilismos varios.

Ante esta situación es que se publica el trabajo realizado por los cientistas sociales de la Consultora Z a la que tuvimos acceso y afanamos como corresponde a un buen peronista.



Publicada (y robada por nosotros, como corresponde…) por http://www.eltuku.blogspot.com/

Pelotudeces....

A los que tenemos memoria, nos dicen “nostalgiosos”. (Y ya sabemos a quiénes les conviene no recordar).

A los que queremos un país mejor, nos dicen “utópicos”. (Y ya sabemos quién mandó acabar con las utopías).

Si hablamos de distribución del ingreso, nos dicen “setentistas”. (Y ya sabemos a quien añoran los que así nos etiquetan).

Si rescatamos empresas públicas, nos dicen “estatistas”. (Y ya sabemos por qué no quieren que las rescatemos).

Si queremos que todos puedan expresarse, nos dicen “amordazan la prensa libre”. (Y ya sabemos que “prensa libre” es “libertad de empresa”).

Si hacemos algo a favor de los más desprotegidos, nos dicen “populistas”. (Y ya sabemos quiénes no quieren lo popular).

Cuando se les acaban los adjetivos “descalificativos”, nos dicen “pelotudos”.

PELOTUDOS ARGENTINOS:

Hagamos una Patria de pelotudos.
Tengamos un Gobierno pelotudo.
Votemos un Congreso pelotudo.
Construyamos una Justicia de pelotudos.
Formemos unas Fuerzas Armadas de pelotudos.
Tengamos medios de comunicación pelotudos.
Formemos maestros pelotudos.
Apoyemos a los empresarios pelotudos.
Vivan los sindicalistas pelotudos.
Fundemos una nueva Universidad para pelotudos.
Incentivemos científicos pelotudos.
Demos ocupación plena a todos los pelotudos.
Mostremos al mundo lo pelotudo que somos.

UNION ARGENTINA DE PELOTUDOS.

Miguel Angel Ceriani

martes, 16 de junio de 2009

Aguad no resiste un archivo!!!


El spot publicitario de Oscar Aguad y Ramón Mestre (h) termina con la frase "CON KIRCHNER, NI EN FOTO".
Sin embargo quienes hoy se jactan de no sacarse una foto con un ex presidente democrático, son los mismos que cuando gobernaban la provincia y la municipalidad de Córdoba recibían al asesino serial, hoy condenado por la justicia federal, Luciano Benjamín Menéndez, en todos los actos oficiales.
El cuarto desde la izquierda, como ya habrás notado, detrás del asesino, es el propio Oscar Aguad, hoy primer candidato a diputado nacional por la UCR, durante un acto oficial.
Como nos explicará este señor que
"CON MENENDEZ SÍ EN FOTOS"?????

A 54 años de la barbarie...

Cuando llegue a Villa de las Rosas, al tiempo, me enteré que había una persona conocida como “Matuco” (el “Matuco” Torres), que según decían, se jactaba de haber bombardeado la plaza de mayo, es más, algunos agregaban que solía afirmar que en septiembre del ´55, quiso ir a bombardear la cañonera donde se refugió el Gral. Perón pero se lo impidieron.
Siempre creí esa historia a medias. En los pueblos chicos se cuentan tantas historias que es difícil, al principio, encontrar la delgada línea entre lo real y lo irreal.
Mientras tanto el Matuco paseaba en su chata peugeot con un parche negro en uno de sus ojos, y con una cara de impunidad que causaba escalofrío (de odio), eran los años del proceso.
Muchos años después, estando en la feria del libro, en la Rural, compré un libro que hablaba precisamente del tema.
Ya con el libro en la mano, busqué en la lista de “pilotos” de la marina de guerra y ahí estaba: el entonces capitan martin torres, había sido uno de los carniceros de la peor masacre cometida contra el pueblo de la nación.
A todo esto, él ya había muerto, la vejez, la enfermedad, se lo habían llevado.
Y ahora, en un día como hoy, donde recordamos a las víctimas de semejante barbarie uno se pregunta, piensa, que si atento a la imprescriptibilidad de los crímenes de lesa humanidad, no correspondería una condena post morten a los asesinos.
Sería justo,
una condena moral
por la memoria y para honrar a los caídos.

lunes, 15 de junio de 2009

Una vez más la mentira de Clarín...

Estados Unidos desmiente a Clarín y asegura que "faltó a la verdad"El Departamento de Estado norteamericano emitió hoy un comunicado donde expresa su "objeción en los términos más duros posibles" a la nota publicada en la que el matutino afirma que Argentina "no estaba en la agenda" de Washington "por la posición de su Gobierno". "Las citas textuales atribuidas son falsas", subrayó.

Washington).- El Departamento de Estado de los Estados Unidos emitió hoy un comunicado donde expresa su "objeción en los términos más duros posibles, a la nota" publicada por el diario Clarín que afirma que la Argentina "no estaba en la agenda" de los Estados Unidos "por la posición de su Gobierno". Según el comunicado oficial del gobierno norteamericano, "las citas textuales atribuidas son absolutamente falsas y fueron publicadas sin estar basadas en la verdad". Los firmantes de la declaración son el subsecretario de Estado adjunto principal de Asuntos del Hemisferio Occidental, Craig Kelly y el director para Asuntos del Hemisferio Occidental, Milton Drucker -ambos del Departamento de Estado-, quienes sostienen que "nos sentimos defraudados ante el hecho de que no hubo ningún intento de contactar a los participantes de Estados Unidos para confirmar las citas atribuidas a ellos. Esperamos que esta práctica sea corregida en el futuro". El documento completo, describe textualmente lo siguiente: "Escribimos para expresar nuestra objeción, en los términos más duros posibles, a la nota "El gobierno busca el apoyo del Tesoro Norteamericano", que apareció el 12 de junio en la edición de Clarín. Las citas textuales atribuidas son absolutamente falsas y fueron publicadas sin estar basadas en la verdad. Estamos totalmente en desacuerdo con la malinterpretación de nuestra conversación con representantes de la Unión Industrial Argentina (UIA). De hecho, valoramos enormemente la fuerte relación que tenemos con el Gobierno de Argentina, el que está basado en objetivos compartidos, valores e intereses comunes. Nuestras dos naciones desarrollaron una relación positiva y productiva construida sobre nuestro compromiso compartido por los valores de la democracia y derechos humanos. Nuestras relaciones cubren un vasto ámbito de áreas de mutuo beneficio, incluyendo seguridad regional, contra terrorismo, interdicción de drogas, no proliferación y misiones para el mantenimiento de la paz de Naciones Unidas. Hemos reiterado públicamente, nuestro deseo de mantener y de fortalecer esas relaciones, y de aumentar la cooperación en áreas de educación, energía renovables, y ciencia y tecnología. Nuestro compromiso de hacerlo, es manifestado en nuestro diálogo de alto rango, el cual resultó en cuatro acuerdos bilaterales y nuestro continua cooperación en tales foros multilaterales como Naciones Unidas, la Organización de Estados Americanos y el G20. Nuestro encuentro con la UIA, a su pedido, proveniente de nuestro deseo de buscar lazos más fuertes con la comunidad de negocios de la Argentina. De hecho, nosotros planeamos viajar a la Argentina en los próximos meses para continuar estas discusiones con el gobierno y el sector privado, las cuales apuntan a fomentar oportunidades para compañías argentinas y estadounidenses, en el medio de la crisis económica global. Nuestro deseo de desarrollar lazos más cercanos con el sector privado argentino y las organizaciones civiles, es un natural complemento de las acciones que venimos tomando para reforzar y expandir nuestra relación existente y fuerte con el Gobierno de Argentina. Tenemos una relación de largo tiempo con Clarín, un periódico de gran reputación y bien establecido, y nos sentimos defraudados ante el hecho de que no hubo ningún intento de contactar a los participantes de Estados Unidos para confirmar las citas atribuidas a ellos. Esperamos que esta práctica sea corregida en el futuro".

miércoles, 10 de junio de 2009

El voto en las metropolis (mamadera!!!)

(Un psicólogo por aca por favor...)

El veintiocho de junio próximo, una parte no menor de la ciudadanía de la ciudad autónoma de Buenos Aires votará por la candidata Michetti.
Las explicaciones a este hecho pueden ser muchas, de ellas, la más consistente sería la que indica que Buenos Aires, es precisamente el mayor centro de residencia del poder económico de la Argentina, poder que históricamente y como es sabido, se expresa por la derecha. No obstante, esto sólo no alcanza. Los sectores más concentrados de la economía son inversamente proporcional a su número; poseen mucho poder, pero son pocos, con lo cual es de suponer que existen muchos ciudadanos que no integran este “selecto” grupo de escogidos y que, viviendo en Buenos Aires, eligen votar así.
“El falso sentido de la pertenencia”, puesto de manifiesto durante la mal llamada huelga del campo (que no fue ni huelga ni del campo), parece aparecer de nuevo, con lo que queda de manifiesto el bajo nivel de conciencia de una ciudad que se vende al resto del país como su máximo referente.
Lo que resulta más curioso aún, es que para librar esta cruzada a favor de los poderosos y volver al neoliberalismo - en nombre de la democracia y la república -, apoyen a una candidata cuya única virtud es la imposibilidad de caminar sobre sus piernas.
Como si la invalidez fuera en si misma una virtud.

Paralelamente, en la ciudad de Córdoba, y en respuesta a un gobierno provincial herrático, ineficaz, e inservible; sus ciudadanos se disponen, en nombre de las mismas pelotudeces que sostienen los porteños seguidores de Michetti, votar a Juez, quien ha demostrado ser tan herrático, ineficaz, e inservible; como aquel que le arrebató la gobernación en el 2007 por unos pocos votos.
Como si una frase cómica y estúpida a cualquier tragedia de los cordobeses y argentinos fuera una razón de peso a la hora de votar.
Algo así como que tinelli fuera candidato.

Michetti, mientras fue vice jefa de gobierno de Buenos Aires, tuvo ausencia casi perfecta a las sesiones de la legislatura de la ciudad, a pesar que era ella quien debía presidir tales sesiones (de presentar proyecto ni hablemos: ni UNO).
Juez, cuando fue intendente de Córdoba, no resolvió ni UNO de los graves problemas que padecía esa ciudad.
¿Que está pasando con los argentinos?
¿Será esta la forma de manifestar su desprecio a la política?
O será que el desprecio a la política deviene en idiotez … en analfabetismo político…

"El peor analfabeto, es el analfabeto político.
No oye, no habla, no participa de los acontecimientos políticos.
No sabe que el costo de la vida, el precio de los frijoles, del pan, de la harina, del vestido, del zapato y de los remedios, dependen de decisiones políticas.
El analfabeto político es tan burro que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo que odia la política.
No sabe que de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado y el peor de todos los bandidos, que es el político corrupto, mequetrefe y lacayo de las empresas nacionales y multinacionales". Bertolt Brecht. (1898)

Los camaleones ponen huevos... (en varias canastas?)

En los últimos tiempos se ha producido en el Valle de Traslasierra, un fenómeno que, de reproducirse de la misma forma en el resto del interior del país, sería preocupante.
Como sabemos, en nuestra Provincia el gobernador ha jugado aparentemente de manera errática en lo que hace a su alineamiento político.
En realidad lo más grave es que ha jugado, cuando lo que debería haber hecho es definir de que lado está y por sobre todo, expresarle a su ciudadanía el porque de esa decisión; esa ciudadanía que en el 2007 le dio el voto que le permitió llegar a la gobernación (por un estrechísimo margen por cierto).
Y si profundizamos un poco más veríamos que tal vez, y en realidad, en esta coyuntura se manifiesta tal cual es; el problema pasa por no haberlo manifestado antes (mas allá que muchos lo suponíamos).
Como agravante, la figura que aparece como alternativa, no es ni más ni menos, que más de lo mismo (valga la redundancia), o para decirlo con mas precisión “peor de lo mismo…”.
Como es de esperar, tales actitudes devienen en modelos a ser copiados. Y es por ello que los intendentes y jefes comunales transerranos no se pierden ningún convite.
Si el que llega a estas latitudes es el gobernador schiaretti, ahí van todos… no sea que después no aparezca el cheque correspondiente a alguna partida (algo asi como lo que denuncia schiaretti del gobierno nacional, que él mismo aplica con toda justeza en su gobierno provincial… (será se aplicar aquello “que el ladrón piensa que todos son de su misma condición…?”).
Si el que viene es algún enviado del gobierno nacional, no falta nadie, ahí van todos a ver que se le puede sacar a la nación para mejorar sus arcas (en muchos casos las propias…).
Tal impudicia llega al extremo de que varios de ellos (intendentes y jefes comunales), manifiestan sin ningún pelo en la lengua que pondrán huevos en varias canastas… si tal cual lo leen.
Si a todo esto sumamos el nivel de corruptela característico en estos gobiernos locales, y el cúmulo de denuncias contra ellos que envejecen en cajones de alguna fiscalia, entonces, digo, uno se pregunta: para que insistir en hacer política con los gobiernos municipales?, no será ya el momento de comenzar a construir el Movimiento Nacional y Popular separando la paja del trigo…?



Especies autóctonas del Valle de Traslasierra

En los últimos tiempos ha proliferado, con inusitado ímpetu, una no tan rara especie de camaleón originario del Valle de Traslasierra.
Esta variedad, que algunos eruditos en la materia han dado en llamar
“cacicus camaleónido”, se caracteriza, entre otras, por la costumbre de cambiar rápidamente el origen de sus alimentos, sin que ello implique una merma en su voracidad alimentaria (entre otras).
Lo más insólito es, además, su costumbre de poner huevos en distintos nidos (o canastas…?).

lunes, 8 de junio de 2009

Ellos y nosotros en el Pueblo Chico

Se ha dicho siempre “pueblo chico infierno grande”. Algo de verdad hay. Te ven charlando con la mujer de alguien en la esquina, en la otra cuadra ya te vieron salir de la casa a la hora que no estaba el marido y a las tres cuadras, la dejaste embarazada y se armó un quilombo bárbaro.
Es así. Casi siempre.
Los pueblos chicos del interior, también tienen otras cosas. Emparejan por necesidad. Se va a la escuela con el que no tiene para comer, con el hijo del chacarero, con la hija del cerealista, con el sobrino del estanciero, con el más chico del alambrador y con el más grande del gerente de la cooperativa. Por eso emparejan. Como no hay dos escuelas todos vamos a la misma, en eso estamos emparejados.
Pero desde chico la diferencia se percibe. La hija del cerealista estudia baile en una academia de la ciudad, y en cada acto la señorita la pone de protagonista en el numerito. El del gerente de la cooperativa, tiene el co-protagónico y el del estanciero será el tercero en discordia. Los demás a duras penas vamos a ser de plantita, ignoto soldado invasor o negrito candombero.
Todavía recuerdo la vergüenza que me daba salir, con la cara embadurnada de corcho quemado, en patas (en pleno julio), la camisa raída y un tamborcito hecho con un tarrito de dulce de leche “El Corralito”... que papelón. Cuando los negritos salíamos a escena, y siempre salíamos todos juntos, valla a saber por que, la platea de padres susurraba un “Huhhh los negritos”, como entre ternura y lástima. Una actué de caballo blanco de San Martín. Me pusieron una calza y una polerita blanca de mi hermana sobre mi escuálido físico de ocho años, un caretón de caballo y me montaron a Rodriguito, que como no me quería taloneó de lo lindo. “Ellos” hacían los protagónicos y “nosotros”, los personajes de relleno.
Como uno es un niño, a esas alturas no se da cuenta de las diferencias, pero a medida que vas haciéndote grandecito te avivas.
A los bailes “nosotros” entrábamos de colados o lo más tarde posible para zafar de la entrada y una cerveza era de garrón o haciendo una vaca. “Ellos” entraban antes, se tomaban un wiskcola y marcaban las mejores minitas. Si había que ir a un boliche a la ciudad “nosotros” en colectivo cuatro horas antes, o a dedo, y “ellos” en la chata del viejo. En el pueblo “nosotros” andábamos a pata y “ellos” en la misma chata o en moto. “Nosotros” a tomar unos vinos en lo de Oscarcito Montenegro o en lo Molinari y “ellos” en la Juventud Agraria coca y tostado. Y así.
Cuando llegamos a grandes de verdad, “nosotros”, o nos vamos a buscar nuevos rumbos a otros lugares o trabajamos para “ellos” o los padres de “ellos” o los tíos de “ellos” o los abuelos de “ellos”.
Así que desde chico se sabe quienes somos “nosotros” y quienes “ellos”. Además ya es así desde siempre e incluso, quienes te quieren, entienden que no está mal que trabajes para “ellos”, muchas veces en negro, sin obra social y agachando la cabeza ante “el patrón”, que con el correr del tiempo van a ser “ellos” mismos y encima recordarán, sin mencionártelo, que pese a la plata, la chata, la moto y las botas de carpincho, vos le cagaste la mina porque eras más.
Por eso yo al “pueblo chico infierno grande”, desde mi pre-adolescencia le encontré otro significado que el que tiene popularmente. Comprendí que era un “infierno” atar mi futuro a un “pueblo chico” y decidí buscar nuevos caminos en “pueblos más grandes, para que el infierno fuera algo más chico”, aún a costa de menor tranquilidad, de pérdida de vínculos y de aprender contra reloj nuevas idiosincrasias. (Cocodrilo que se duerme es cartera).
Muchos de “nosotros” nos fuimos. Casi todos “ellos” se quedaron. Son más. Y sumados los que siempre han sostenido que así está bien, aún cuando son como “nosotros”, ya no hay nada para hacer. Porque depende de “ellos”.
Algunos valientes se quedaron, para pelearse de vez en cuando en la cooperadora, donde nunca te dan bola por... “loquito”.
“Ellos” no pintan la escuela entre todos los miembros de la comunidad educativa como lo haríamos “nosotros”, renegando con los chicos, tomando unos mates. “Ellos” donan un par de vacas, te organizan un desfile con los caballos cagándote toda la calle, te hacen una cena, con una tarjeta que pueden pagar “ellos”, una feria del plato para que participen las mujeres y con los fondos, pagan a un pintor, lo tienen cagando y le piden rebaja porque, al final, “la escuela es de todos”.
Cuando la patronal del campo impuso el lock out por las retenciones a la soja, se potenciaron “ellos”. ¿Cómo no iban a tener razón? Siempre la tuvieron. ¿Qué vienen a hablar ustedes? Acá las cosas son así y se acabó. Que re distribución ni que carajo!!! Que vallan a laburar!!!
Por eso los “pueblos chicos siempre fueron un infierno grande”, al menos para “nosotros”. Porque siempre hicieron lo que a “ellos” les pareció y punto. Las decisiones se tomaron siempre entre el gerente de la cooperativa, el de la cerealera, los tres o cuatro chacareros con más hectáreas, alguna maestra organizadora de numeritos escolares devenida en directora y algunos boludos útiles que servían para legitimar las decisiones. Así que los muchachos del capital sojero, convencidos hasta las muelas, cortaron todas las rutas y lo hicieron a su modo. Puteando, tirando piedras, apretando, cagándose en la legítimas decisiones de las mayorías populares, impidiendo el paso de ambulancias, tirando leche, carne, tomando de rehenes a los camioneros, desabasteciendo, con prepotencia, con las chatas, las motos, los tractores, con el costillar en la rotonda, con el peón haciéndoles el asado, y con alguna bandera y alguna escarapela que le sobró al Rodriguito que me cagó a talonazos. Viva la patria…. Y la puta que lo parió.
Pero, no son mala gente. Es verdad que la mayoría trata de evadir todos los impuestos que puede, que tienen empleados en negro, que tapan todo con plata (abortos, borracheras, doble familia y hasta algún muerto en accidente), pero son buena gente. ¿Cómo no va a ser buena gente si los vemos todos los días en el pueblo?¿Si fuimos a la escuela con ellos? Los malos están en la películas, o en la tele, pero acá no!!!
“Ellos” estaban equivocados. Al principio no se dieron cuenta, pero hoy saben que estar en contra del modelo de país que propone el gobierno es la única opción que les garantiza que las cosas sigan como hasta ahora. Ahora saben muy bien que necesitan desgastar al gobierno, limarlo, tumbarlo lo antes posible y hacer que algún Cleto vuelva todo a su lugar. Glifosato, soja y a la mierda.
Pero así como “ellos” tienen la plata, “nosotros”, hoy tenemos la voluntad popular y la desición política. Vendrán años difíciles.
Es bravo hacerles entender que, sin importar el tamaño de ningún pueblo, si logramos mayor inclusión, si “ellos” dejan de atragantarse con la tajada más grande, si pintamos la escuela entre todos, si el que no tiene para comer también puede hacer de San Martín, si sacan los tractores de arriba de la ruta, si cambian la prepotencia, si en lugar de llevar la soja al puerto la manufacturamos acá, si la que baila en la academia hace de plantita de vez en cuando, si pagan todos los impuestos, si ponen en blanco a los peones, si respetan a las mujeres, si no tapan las cosas con plata, si resignan la gerencia de la cooperativa, si se enteran de una vez que hay otras personas que somos “nosotros”. “ellos” también van a estar mejor. Este modelo está explicando y demostrando que así debe ser.
Se vuelve al “pueblo chico”. Se vuelve y se ilusiona con que se puede cambiar esa inercia de “infierno” y apaciguarla con unos baldes frescos de verdades, pero es al pedo. Los poderosos de esos “pueblos chicos” siempre ganan. Los que agachan la cabeza son funcionales y así se pasan los días, los años y a veces la vida. Entonces uno ya se va del todo, porque aunque vuelva cada tanto, no pertenece más ahí.
De tanto irme del “pueblo chico”, conocí pueblos y ciudades más grandes, y empecé a ver personas parecidas a “nosotros y a “ellos” por todos lados. Pero el infierno se puede transformar en un lugar un poco más fresco donde todos podamos vivir.
¿Y el puterío?... no me lo saquen. El puterío es vino lento en el boliche de Oscarcito Montenegro.
Gracias Gustavo Romans
MAS OPINIONES EN www.importatuopinion.blogspot.com

domingo, 7 de junio de 2009

LOS CUENTOS INFANTILES

Cuando era chico, mi extrañada Abuela Pancracia, solía contarme cuentos para que me durmiera. Siempre, sus cuentos terminaban “…y fueron felices y comieron perdices”.
Según cuentan mis mayores yo me dormía sonriente y feliz...

Pasado el tiempo, y ya mucho más grande, me sucedieron dos cosas: por un lado, dejé de creer en los cuentos (... infantiles, porque de los otros, creí en varios), y por otro lado me entró una honda preocupación por saber qué había pasado después de lo que me contara mi abuela. E incluso, llegué a preguntarme por ciertas cosas sucedidas dentro de los cuentos.

Es así que muchas noches me quedé despierto pensando qué habría sido del leñador que salvó a Caperucita. ¿Se habrá casado con ella, o habrá ido en cana por estupro?; cuando el Patito Feo se convirtió en cisne, y decidió casarse, ¿Invitó a alguno de sus antiguos hermanos para que fuera el pato de la boda? ¿Qué fue de esos discriminadores patos cuando crecieron? ¿Es verdad que se convirtieron en pato a la naranja?. Cuando el Príncipe besó a la Bella Durmiente, ¿Tenía buen aliento?; al entrar Pinocho en su adolescencia, ¿exploró las posibilidades eróticas de su nariz al mentir? En el caso de Blancanieves, ¿se llevó a vivir a los enanitos con ella? Los pajaritos que se comieron las miguitas de Hansel y Gretel, ¿lo hicieron por hambre o de puro hijos de puta?

También me preguntaba qué opinarían las perdices, de ser siempre las proveedoras del plato principal del final del cuento, pero ésa es otra historia, y ya sabemos que la historia la escriben los comedores, no los comidos...

Un caso paradigmático de estas dudas, es la historia de Cenicienta. Un cuento infantil que ha sido fuente inagotable de inspiración de todos los autores de telenovelas. Es más, lo único que falta es que en una placa digan que el zapatito que pierde la protagonista es gentileza de Ricky Sarkany.

Con respecto a dicho cuento, la pregunta que me desveló era: ¿qué había sido de la vida de las hermanastras? Envidiosas, crueles, taimadas… ¿Las habría llevado Cenicienta a vivir al Palacio Real con ella? Por supuesto, el sentido común me decía que no, pero entonces, qué curso habían seguido sus vidas?

Hace muy poco tiempo, encontré por Internet, un capítulo en castellano del libro “Kid’s Tales. New Revelations”, del escritor y economista alemán radicado en Nueva York, Lüge von Lügenhaft Verlogen que me develó la incógnita. El capítulo de mentas se titulaba “La Cenicienta: el destino de sus hermanastras”.

En este fragmento, el autor comienza contando que si bien la Cenicienta y el Príncipe “fueron felices y comieron perdices”, al ir asumiendo más responsabilidades de Estado, se dieron cuenta de que no todos comían perdices. Es más, se percataron entonces de que, en realidad, las perdices eran de unos muy pocos nobles. Ellos se pusieron entonces a tratar de que las perdices fueran más y mejor distribuídas en el reino.

Pero Lüge von Lügenhaft Verlogen deja rápidamente este tópico, remitiéndonos a su ensayo “Verteilung rebhuhn”, que traducido sería algo así como “De la distribución de las perdices”, que próximamente será traducido al castellano, según asegura en su blog de Internet.

Vuelve entonces a la vida de las hermanastras de Cenicienta. La mayor, considerada por su madre “el chiche” de la familia, se casó con un noble y gracias a él logró entrar en la realeza. Si bien fue tratada con respeto y consideración (por su marido), no logró brillar demasiado en la corte y siempre mantuvo una actitud hosca y hostil hacia Cenicienta. No desperdiciaba oportunidad para criticarla, y se ponía roja de furia cuando alguien alababa la belleza, sencillez e inteligencia de la princesa. Y aunque todo el mundo estuviera de acuerdo con alguna medida del Príncipe reinante, ella (la hermanastra) llevada por su envidia, siempre le encontraba reparos. Y así transcurrió su vida, carcomida por la envidia y el resentimiento.

En cuanto a la otra hermana, mucho más bullanguera que ella, pasó por varias etapas. Nos cuenta Lüge, que se llegó a casar, a tener familia, pero que esa etapa no le duró demasiado. A partir de su separación, entró en algo así como en un estado místico-gastronómico-predictivo, creyéndose, en primer lugar, el dedo de Dios en el Reino, apuntando siempre al Príncipe y a Cenicienta, y llenando baúles y baúles de papeles con denuncias que morían arrumbadas en algún galpón judicial, dado que nunca llegaban a nada. Pero no sólo eso, sino que – evidentemente por su angustia oral (diría un freudiano) - su apetito se convirtió en voraz e incontenible. Y juntando ambas cosas, salió a comerse a los chicos crudos, porque nuevamente se convirtió, esta vez, en la viva reencarnación de Nostradamus.

En esta última etapa se dedicó a recorrer los pueblos, con vaticinios apocalípticos acerca de lo que sucedería si la Cenicienta y el Príncipe seguían reinando. Al principio, algunos ingenuos pueblerinos creyeron sus profecías, pero pasado el tiempo, y viendo que no se cumplía ninguna, sino todo lo contrario, la fueron dejando de lado. Obviamente, no todos, porque, nos cuenta Lüge von Lügenhaft Verlogen, que un grupo de nobles que deseaba vivamente que el Príncipe y Cenicienta se dejaran de intentar el mejor reparto de las perdices, no sólo la apoyaban, sino que trataban por todos los medios de difundir sus ideas.

Lüge von Lügenhaft Verlogen termina diciéndonos que en definitiva, ninguna de las hermanastras fueron capaces de soportar la envidia que les provocaba el hecho de que Cenicienta llegara adonde ellas nunca pudieron llegar.

Para finalizar, debo confesar que últimamente leer diarios y ver televisión me inspiran hermosos recuerdos de mi infancia.

Miguel Angel Ceriani

Carta Abierta: A vos te lo digo...

A vos te lo digo. Sí a vos. Que decís que no te importa nada. Que decís que son todos iguales. Que decís que no te metés porque es inútil. Que decís “éste” país no se arregla más. Si, a vos te hablo. Tengo una mala noticia para darte: vos también hacés política. Cuando decís alguna de estas cosas, estás haciendo política. Pará. No te asustés. Que no estás solo. También hacen política Tinelli, Susana, Mirta, Pergolini, Pomelo y todos los pomelos que andan dando vueltas por ahí.Claro, muchos de ellos ni siquiera lo sospechan. Otro sí, pero se hacen los nabos. Te digo más, para que te termines de tranquilizar. Esa forma de hacer política que vos tenés es hoy ampliamente mayoritaria en la opinión pública. Se puede decir que está de moda y te permite transitar por la vida con cierta comodidad. No te vas a pelear en el cumpleaños de tu tía con la familia, ni a la salida de la facultad con otros pibes, no vas a hacer enojar a tu suegra, vas a quedar bien en el after office con las chicas. Es más: si querés reforzar tu costado seductor y no pasar por un absoluto hueco -que también mide, eh, sobre todo en las capas educadas de las clases medias altas urbanas.Sí, ser hueco, despreocupado y con un toque de cinismo es una actitud muy cool-, como te decía, si no querés dar hueco cien por ciento, podés decir que colaborás con Greenpeace en “salvemos a las ballenas”, esos animalitos tan lindos. O que donás tu vuelto en el hiper para “Felices los pobres”. Listo. Ahí tenés otro chamuyo en la onda sensible que es infalible en las mesas de Palermo Algo. Rematá con un “para qué voy a ir a votar, si siempre ganan los mismos” y te garanto que te espera una noche mágica con la rubia que sonríe mostrando un poquito la dentadura perfecta. Pero que te quede muy claro: sos un militante político.Tu comité (iba a decir unidad básica, pero temía que salieras corriendo) son los programas de la tele. Y los debates de tus congresos partidarios son los llamados de los oyentes a las radios. Y aunque no lo sepas, tenés un montón de candidatos. Claro, vos no los elegís ni los votás en ninguna interna, pero ellos sí te eligen a vos. Ya te expliqué por qué: porque ustedes son muchos. Entonces hay muchos políticos que hacen política hablando mal de la política para que a vos te guste lo que dicen, te sientas “representado”. Bueno.Tengo otra mala noticia para darte: te están tomando por gil. Ni siquiera te están ofertando un plan de gobierno ni, vade retro Satán, una determinada expresión ideológica. Que va. Lo que ellos quieren es que vos los votes, si es que vas a votar, claro. Lo único bueno de esto es que, si llegaran a ganar, podrás criticarlos sin culpas, total son políticos. Pero no quiero que te pongas mal. Por eso te voy a hacer una confesión: a veces te tengo envidia. Hay días en que siento que es todo tan inútil, tan difícil, tan cuesta arriba…Y te veo a vos, tan despreocupado y descomprometido, tan entusiasmado con lo linda que te queda la camisa nueva que te compraste, que te tengo un poco de envidia.Igual me dura poco. En general me pasa que, si me pongo así, apago la televisión y salgo a caminar.Y miro la calle y las ventanas de los edificios. Y pienso en barrios y pueblos que pude conocer. Y pienso en las caras sufridas que allí vi. Sufridas de pobreza, de exclusión. Y también pienso en mi hija. Porque, ojo, en tren de confesiones admito que tengo mi costado egoísta: yo quiero que mi país sea más justo porque pienso en mi hija. Perdoná, no te calentés, ya sé, dije “justo” y para que sea más justo hay que hablar de política, no? Pero pensá en esto. Apostemos al diálogo y al consenso: somos casi iguales. Vos y yo. Hacemos política. Sólo que yo lo admito.
Publicado por http://mendietaelrenegau.blogspot.com/
(Gracias Daniela!)

jueves, 4 de junio de 2009

El escrache es de las organizaciones populares y no de la agrogarquía

El escrache nació como respuesta a la falta de justicia de parte del poder político que gobernó nuestro país desde el retorno de la democracia hasta el año 2003. A mediados de los ochenta se promulgaron las leyes del perdón: Punto Final y Obediencia Debida. Y durante los años noventa se condensó la impunidad con los Indultos.
"Juicio y Castigo" fue la consigna que por años levantaron las organizaciones de derechos humanos de nuestro país. Muchas vueltas a la plaza de Mayo y un crecimiento notable a nivel político no solo en nuestro territorio sino también en el exterior. En la segunda mitad de la década del noventa, pleno auge neoliberal menemista, y de la mano de la sangre nueva que se instaló en la escena política a partir de la agrupación H.I.J.O.S., nació una novedosa e influyente herramienta de intervención política y social: "Si no hay justicia hay escrache".
La modalidad era siempre la misma. Se caía en el barrio dos meses antes de escrachar al represor. Se articulaba con otras organizaciones políticas, sociales y culturales del barrio en un ámbito que con el tiempo tomó vida propia: la mesa de escrache. Se tejía una red solidaria entre compañeros que venían de diferentes experiencias y posturas ideológicas partidarias con el objetivo común de condenar socialmente al genocida. Se le sacaban fotos saliendo de su casa. Se armaba un volante con su rostro, su prontuario, dónde trabajaba, dónde vivía y hasta el teléfono de su casa para dejarle un mensajito. Trabajo en conjunto, propaganda y difusión, recitales, charlas, y mucho agite.
Cuando llegaba el día del escrache, el genocida, claro está, no estaba en casa. Tampoco en el barrio. Y la Policía Federal vallaba todo el frente del domicilio. Se llenaba de cámaras de televisión. El punto de reunión era a algunas cuadras de la casa. El camión con el sonido adelante, las organizaciones de derechos humanos al frente, y detrás las organizaciones políticas, sociales, culturales, universitarias y de secundarios, cooperativas y murgas. Grupos callejeros como el GAC colgaban de los postes de luz unos carteles amarillos de gran porte que le avisaban al vecino que faltaban 400, 300, 200 metros para llegar a la casa del genocida. Mientras avanzaba la columna, se volanteaba en las dos veredas. Los vecinos en los balcones, en las puertas de sus casas, no podían creer que esa persona que los saludaba con una sonrisa todos los días era un torturador, un secuestrador, un apropiador de niños.
Frente a la casa del represor los H.I.J.O.S. leían, casi a los gritos, y desde la boca del estómago, un lúcido y durísimo documento. La búsqueda de justicia. La no reconciliación con los genocidas ni con los cómplices. La reivindicación de la lucha de nuestros padres. El pedido por los hermanos apropiados. La condena social.
Para cerrar, bombas de tempera roja reventadas contra la puerta, las ventanas y el techo de la casa o departamento: "genocida escrachado". El barrio entero se enteraba quién era el tipo que vivía entre ellos y al otro día se tenía que disfrazar para ir a comprar papas, o directamente mudarse de barrio. Alerta, vecino: al lado de su casa está viviendo un asesino. De esta manera quedaba edificada la condena social. El panadero no le vendía más pan y el remisero se negaba a hacerle un viaje. Ante la falta de justicia, la condena social aislaba al represor y su casa se convertía en su propia cárcel.
De eso se trató el escrache como practica política: desenmascarar al torturador. Sacarlo a la luz. Hacer público quien era ese vecino y denunciar su pasado.
Hoy los medios titulan que los productores agropecuarios escrachan a los funcionarios políticos que votaron a favor de las retenciones móviles a la soja. La Sociedad Rural, a través de las declaraciones de su presidente Hugo Biolcati, argumenta que las reacciones son entendibles porque el sector está en la ruina por las políticas públicas del gobierno.
Las cámaras patronales no escrachan: atacan. Son violentos y desestabilizadores. Los organismos de derechos humanos no provocaron ningún acto de violencia a lo largo de los más de treinta años de lucha. Y la coherencia, el ejemplo, terminó dando su fruto. Nestor Kirchner, ni bien asume la presidencia en mayo del 2003, toma la responsabilidad de juzgar y condenar a los responsables del terrorismo de Estado. Las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo ocupan el lugar que se merecen. 24 de marzo: día nacional de la Memoria, la Verdad y la Justicia. Hoy, los genocidas están siendo juzgados y condenados a pasar el resto de sus días en cárceles comunes.
El sector rural escracha a Rossi, el jefe de la bancada del Frente para la Victoria en Diputados, porque votó a favor de una ley que buscaba beneficiar a las mayorías. Ellos, claro, sienten amenazados sus intereses de clase, la soja transgénica, la ganancia extraordinaria que, justamente, acumularon bajo el modelo económico instaurado por el kirchnerismo. No hubo peones rurales en los cortes de ruta ni mucho menos en los ataques que vienen sufriendo los cuadros del oficialismo. Ellos representan los intereses de una minoría que ha demostrado una intolerancia repudiable. No hay ley ni instituciones, no hay consenso ni Congreso Nacional. Son un grupúsculo surgido de los sectores más retrógrados de algunos pueblos del interior de nuestro país: dirigentes patronales, empresarios, punteros políticos y hasta representantes de la iglesia conservadora local. La Sociedad Rural de cada uno de estos pueblos es quien impulsa y sostiene los embates contra todo sesgo oficialista.
Resulta tragicómico que esa misma Sociedad Rural que de la mano de uno de sus exponentes más nefastos, José Martinez de Hoz, se enriqueció desvergonzadamente durante la dictadura militar, hoy sea quien realiza los actos de agravio al funcionario de turno.
A no confundir los tantos. Estos actos de violencia no son escraches. No tienen organización popular ni objetivos nobles sustentados por muchos años de lucha ejemplar. Amparados por la maquinaria mediática dicen que lo suyo es una respuesta obvia a la situación del sector que dicen representar. Pero no. Son aves de rapiña dispuestos a todo. Ninguno de los funcionarios que esta gente sale a atacar cometió delitos de lesa humanidad ni se ocultan en el anonimato. Tampoco están prófugos de la justicia. Los ataques no están dirigidos contra cómplices, ideólogos y beneficiarios de un golpe de Estado sino contra cuadros políticos del gobierno puestos a trabajar en sus respectivos lugares por medio del voto popular.
Los actos de violencia e intolerancia que vienen de los sectores más reaccionarios de nuestra patria no son escraches. No se parecen ni en forma ni en contenido.
El escrache, como práctica política, pertenece al pueblo y no a sus usureros.
Publicado por GEN

miércoles, 3 de junio de 2009

El Ku- Klux- Klan esta entre nosotros!

Si, amigos y compañeros, lamentamos informarles que es así nomás.
Y si no creen, pensemos juntos…
En momentos en que parece ser que de una vez por todas – y por fin! -, la abominable potencia del norte se muestra dispuesta a bajar las inescrupulosas e inhumanas medidas restrictivas contra CUBA...
Acá, en nombre de las libertades democráticas y republicanas ( a veces me pregunto que querrán decir con eso…), la nueva, gorila y troglodita derecha argentina, reclama que la hermana República Bolivariana de Venezuela, no sea convocada a integrar el MERCOSUR…
¿Hará falta una nueva lluvia de meteoritos…?

martes, 2 de junio de 2009

El pino, el bosque y la morocha

Cortesía de "un día peronista"
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Joven Nº 1
¡Qué profesor garca! Todavía no sé cómo zafé. Me hizo dos preguntitas y le dije lo que el tipo había dicho la otra clase y listo. Me podría haber paseado. Lo que no sé es por qué bochó al pibe que pasó conmigo. Sabía una banda y, cuando el viejo lo dejaba, no paraba de hablar. Hasta parecía que le daba clases el flaco al profesor. Lo que pasa es que se metió en el tema ese que el viejo choto dijo en clase que no se lo toquemos porque piensa distinto. Yo lo banco al chabón en la discusión, pero ¿justo en el parcial? El viejo es un facho de aquellos y al flaco se le ocurre hablar justo de lo que no le gusta.
Joven Nº2
¿No te digo que en estos boliches caretas son unos botones? Vamos a la barra mientras te cuento... Al final tuve que pagar toda la entrada. Nos hacían descuento, pero sólo si entrábamos todos juntos. Lo que pasa es que éramos un montón y nos empezamos a hacer un quilombo con el cambio, con las monedas. Después querían que nos pongamos en fila y hagamos una cola infernal. Y algunos se tuvieron que ir porque no llegaban con la guita.
Si serán botones en estos boliches caretas...
Joven Nº3
¡No me insistas más, chabón! La mina me tiraba onda, eso es obvio, pero no me cabía del todo. No sé cómo decirte, ¿viste cuando está tan regalada que pierde el chiste? Yo venía buscando una piba así desde que tenía como 14 años, justo cuando leí Las venas abiertas de Galeano y la vengo a encontrar justo en mis vacaciones en Tilcara. Dejáme de joder, quería estar de joda y la vengo a conocer ahora. Tenés razón, no te voy a discutir que la morocha está buenísima. Yo quería una mina independiente, así como ella, que piense por sí misma, ¿viste?. Pero en una de ésas, hablando con ella me dí cuenta de que fumaba un montón y de esos cigarros negros que dan una baranda terrible. Bah, tanto no fumaba, pero el humo me molestaba. Después dejó de fumar porque yo se lo pedí, pero ahí me dí cuenta de que si cambió de parecer porque yo se lo pedí, al final no era tan independiente. Además era muy conservadora, loco. ¿Te acordás cómo se vestía? La mina era un camión y no mostraba nada, siempre con ropa holgada, pantalones flojos, zapatillas gastadas, un embole. ¡Claro que cambió! ¿Para qué le habré dicho que le ponga más onda al vestuario? Se me fue para el otro lado, si no había chabón que no la mirara con esas polleritas que se empezó a poner. Salían de los balcones para verle el escote. ¿Quién se cree que es la mina para pensar que yo voy a andar compitiendo por ella con todos los demás tipos? Además, si me pongo a salir con ella, mirá si me mete los cuernos...
Al primer pibe
no le importa que el gobierno nacional esté dando una enorme lucha política y discursiva contra los sectores concentrados de la economía y los grandes medios de comunicación. Mientras se discute la ley de Radiodifusión, que regula a los grupos monopólicos de medios, él prefiere hablar de algo que no le moleste a nadie, como el “tema de la minería”. Sabe que algunos periodistas defienden intereses empresarios, pero a él lo invitan a todos los programas y lo tratan bien porque lo que diga no los va afectar en sus intereses económicos. Sabe que su compañero debía aprobar, pero prefirió limitarse a hablar de lo que quería el profesor garca.
Al segundo
le da lo mismo que se debatan dos proyectos de país, uno inclusivo y otro excluyente. O se profundiza el inclusivo o viene la derecha atendida por sus propios dueños, de la mano de Macri, De Narváez y Duhalde. No hay otra vuelta. Sabe que el boliche les hace descuento si se ponen de acuerdo y tienen paciencia, pero prefiere hacer la propia, aunque al final sea peor y tenga que pagar más y quedarse sólo.
Al último
no hay nada que le venga bien. Esquivando el compromiso, siempre le va a encontrar un pelo al huevo. Si se empezó por depurar la Corte corrupta, había que empezar por los jueces; si se logró una quita del 75% con el FMI, había que lograr el 80%; si se estatizaron las jubilaciones, había que hacerlo antes; si Chávez, Evo y Correa nos llaman compañeros, lo hacen por conveniencia o protocolo. La mina está buena y le da bola pero él prefiere mirarla de lejos.
El 28 de junio los tres pibes votarían a Pino Solanas, excepto que alguien los convenza de que es mucho mejor plantársele al profesor garca, entrar al boliche junto a todos sus amigos con descuento y por supuesto...
¡quedarse con la morocha!